Canciller de Chaves niega que exista un panorama adverso para migrantes en Costa Rica

El ministro de exteriores de Costa Rica, el doctor en Derecho, Arnoldo André Tinoco, negó que el panorama para los migrantes y solicitantes de asilo (sobre todo nicaragüenses) se haya endurecido en Costa Rica ante señalamientos de crítico de la presidencia de Rodrigo Chaves, quien maneja un discurso anti-migrante desde incluso antes de asumir la presidencia en 2022.

“No (se han endurecido las condiciones de asilo), a quien ingresa y solicita refugio vía convención internacional, hay que darle el estatus de solicitante de refugio y luego hay un proceso donde se demuestra si es un caso político o si es un migrante económico”, dijo Tinoco en entrevista con el diario español El País el pasado martes, 23 de abril.

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A la vez, Tinoco asegura que el país centroamericano ya no puede lidiar con la “desbandada” migratoria cuyo origen ubica en 2018, con el inicio de la crisis nicaragüense, pero que también atribuye a migrantes cubanos, venezolanos y hasta chinos.

“Del Sur al Norte, (recibimos) unos 600 mil (migrantes) anuales, entre mil y 4 mil diarios”, la mayoría, un 67%, son venezolanos; “y otro (flujo migratorio) Norte-Sur”, que ha visto a cerca de medio millón de nicaragüenses llegar a Costa Rica desde el inicio de la crisis sociopolítica nicaragüense.

“Nuestros sistemas sociales de educación, salud y seguridad están agotándose y no están diseñados para recibir esa cantidad de personas. Por eso buscamos y solicitamos activamente ayuda financiera internacional para que nos ayuden a resolver un problema cuya causa no es Costa Rica“, declaró el funcionario, siguiendo de cerca el discurso oficial del presidente Chaves.

La gestión de Chaves ha sido duramente criticada en materia migratoria por organizaciones de la sociedad civil. Foto: Rafael Pacheco / La Nación

Los hechos

Dicho discurso es manifiestamente engañoso, puesto que Costa Rica sí ha experimentado cambios significativos en materia migratoria que complican la situación de cientos de miles de migrantes y 250 mil solicitantes de asilo que aún no han recibido respuesta de la autoridad costarricense.

Algunas de estas iniciativas, como un decreto promovido por Chaves en noviembre de 2022 que, entre otras restricciones, impedía a solicitantes de refugio viajar fuera del país, fueron decididamente combatidas por la institucionalidad costarricense.

Otras, como la reinstalación de la línea de pago para solicitudes de asilo, no han sido contrarrestadas y continúan causando dificultades al acceso al derecho de asilo. En la realidad de muchas personas, la espera para conseguir asilo en Costa Rica se ha convertido en un esfuerzo interminable.

El presidente Chaves constantemente enfatiza el costo material de los migrantes en sus discursos, al punto que habla de una “emergencia migratoria”, y bajo sus narices ha proliferado un ecosistema de discursos de odio contra migrantes y mujeres, según denunció en un informe de Naciones Unidas.

Declarar que “el asunto está rebasando los límites de la razonabilidad, está agotando los sistemas”, en palabras de Tinoco, y actuar en consecuencia, es la postura oficial del gobierno costarricense.