“No sólo nosotros tenemos que asumir la factura”: discurso antimigrante de Rodrigo Chaves despierta críticas

Rodrigo Chaves, presidente de Costa Rica, en entrevista con Andrés Oppenheimer en CNN Español, volvió a utilizar la situación de los migrantes para quejarse y pedir ayuda económica a los países receptores como Estados Unidos y Canadá para atajar según dijo la “situación que se nos está saliendo de las manos”. Dichas declaraciones han despertado severas criticas a la Administración costarricense incluyendo diputados y académicos costarricenses.

Chaves declaró que a pesar de que Costa Rica “es un país que se forjó a través de varias olas de migración las del Siglo XX (pasado), después de la I Guerra Mundial, después de la revolución española, la crisis de Pinochet, y (Salvador) Allende en Chile, argentinos, uruguayos, argentinos, venezolanos y a lo largo de nuestra historia el pueblo nicaragüenses somos 5.2 millones de habitantes, y de inmigrantes no nacidos en Costa Rica calculamos que hay un millón, es decir, un 20% de la población, lo hemos hecho de corazón, hemos sido un país abierto”.

Sin embargo, refirió que el problema es “que a esos migrantes les damos escuela o educación, seguridad social, salud y seguridad pública eso nos está costando, dependiendo de quien calcule, entre 200 y 300 millones de dólares al año, en un país que esta bajo un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional que significa mucha disciplina fiscal”.

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Enseguida mencionó que “la ola de migración de venezolanos que están yendo a EE.UU. a través del Tapón del Darién y la situación se nos está saliendo de las manos. Costa Rica quiere seguir siendo un ciudadano global, responsable, que es amistoso, que protege los derechos de las personas, pero este es un problema global y no solo nosotros tenemos que asumir la factura los países receptores de inmigración EE.UU. y Canadá deberían ayudarnos más porque si nosotros fuésemos a portarnos de una manera menos generosa es muy probable que la migración le vaya a ellos“.

También destacó una vez más el supuesto abuso de migrantes económicos que se encuentran parqueados en territorio costarricense que quieren “disfrutar de un salario mínimo que es muy alto”.

Durante la entrevista se destacó que Costa Rica sigue siendo el país más feliz de América Latina, según World Happiness Report 2023. Chaves indicó que “somos gente feliz y agradable, estamos cómodos con nosotros mismos, y con nuestro lugar en el mundo, verdadero países”.

Discurso aumenta la xenofobia

Montserrat Ruiz Guevara, diputada del Partido Liberación Nacional, dijo a República 18 que las declaraciones de Chaves son “absolutamente lamentables”

“Como ha sido usual, el señor acude a discursos de polarización e inclusión en el momento en que Costa Rica necesita de todas las personas, tanto las que nacimos aquí como las que adoptaron a este país como suyo para salir adelante, debe recordar que no solo gobierna para personas costarricenses sino también para las que han venido a vivir en libertad y democracia, características que siempre han distinguido a Costa Rica en el mundo”, mencionó Ruiz Guevara.

A su vez, remarcó que lo mencionado por Chaves es completamente falso debido a que “nosotros tenemos índices importantes de que las personas migrantes aportan el 11.1 % del PIB y el 9.7% del crecimiento económico nacional, muchos campos de la economía funcionan gracias a la población migrante en el sector agrícola y de construcción”.

Por lo anterior, Ruiz Guevara asestó que “el ejecutivo se debe centrar en iniciativas para promover la inserción económica y social de las personas migrantes en lugar de seguir utilizando discursos excluyentes y violentos”.

Ariel Robles Barrentes, diputado de Costa Rica, le mencionó a Chaves que “por si no lo sabe las personas migrantes le dan un aporte invaluable a la economía de nuestro país. Sino le invito a que visite las plantaciones cafetaleras, las piñeras o los cañales. ¿Qué quería? ¿Su mano de obra sin salud, educación o seguridad?”.

En esa misma línea, la socióloga, historiadora y catedrática de la Universidad de Costa Rica (UCR), Isabel Gamboa Barboza, mencionó que con el discurso del señor presidente aumenta la xenofobia.

“Tenemos un presidente que nos entrena en la ruindad cada vez que abre la boca. La xenofobia daña la democracia y nos envilece como humanos. Pero se ve lo potable que le resulta a él, políticamente hablando”, tuiteó Gamboa.

Johana Obando, diputada costarricense por el Partido Liberal Progresista, en su cuenta de Twitter cuestionó a Chavez y le dijo “los inmigrantes han ayudado a construir lo que Costa Rica es hoy y la que será, somos resultado de esa rica mezcla, no solo ahora sino desde siempre”.

Obando señaló que “lo que el Estado debe procurar es la fácil recaudación de impuestos, el acceso oportuno a su formalización, tal y como lo debería hacer con cualquier costarricense, no es dividiendo que un país avanza, no es con discurso del ‘otro’ que crecemos como sociedad. Es reconocer que los procesos migratorios son una constante y que como Estado debemos estar preparados para permitirles su paso hacia otros países”.

Añadió que “recordemos que Costa RICA es un puente en su trayectoria, solicitar ayuda internacional para su corta estadía y a los que deciden quedarse, permitirles aportar a nuestro país, ellos pagan impuestos, seguro social, algunos generan empleos, algunos son empleados tal como un tico más. Los discursos de odio, separación y exclusión del “otro” no son de recibo. En lugar de estar fomentando la xenofobia deberíamos estar enfocados como país en crear las condiciones para más empleo, para más desarrollo, para todos sin excepción de su nacionalidad”.

Omite llamar a Ortega dictador

Oppenheimer en la entrevista le preguntó al mandatario costarricense ¿Daniel Ortega es un dictador o no? a lo que Chaves prefirió no referirse alegando que “Costa Rica es un país que ha vivido a la par de Nicaragua desde que Augusto C. Sandino y antes, hizo su revolución, apoyamos al pueblo nicaragüense recibiéndolos a través de la historia, durante y después, somos respetuosos de esa división que requiere que convivamos”.

También le mencionó que algunos críticos a su administración aseguran que su gobierno ha sido blando o no ha mantenido una postura crítica al régimen de Daniel Ortega en Nicaragua. Chaves afirmó que “Costa Rica no ha sido en lo más mínimo blandos cuando ha habido que referirse a las violaciones de derechos humanos en Nicaragua, porque nos hemos pronunciado contra los abusos, derechos humanos, la detención de los candidatos a la Presidencia, quitar la nacionalidad y volver apátridas a cientos de personas y hemos recibido a monjas que fueron expulsadas, con brazos abiertos, queremos vivir en paz, y denunciamos que en Nicaragua hay situaciones que desde el punto de vista democrático y de Estado de derecho son criticables y las hemos criticado”.

Una vez más, Oppenheimer le cuestionó si Ortega es un dictador y Chaves respondió “eso no me corresponde a mí, nosotros hemos dicho que el proceso electoral no debió hablar incluido la detención de candidatos políticos, eso en Costa Rica sería inconcebible”.