La historia de Ángel Ruiz Alvarado: el joven invidente que destaca en la música

Ángel Gabriel Ruiz Alvarado, originario de Managua, nació con el sentido de la vista severamente limitado, pero eso no lo ha detenido en lograr sus metas.

  • San José, Costa Rica
  • 10:50 am
  • Feb 6, 2024

Ángel Gabriel Ruiz Alvarado toca guitarra y piano, instrumentos que aprendió en su niñez.

Cortesía
República 18

“Es de nacimiento”, dijo Zuleyka Alvarado, madre del joven Ángel Gabriel Ruiz Alvarado, a República 18. Se refiere a su condición de ceguera que lo ha acompañado sus 19 años de vida, pero que no lo ha detenido en sus objetivos.

Aunque Ruiz trató de estudiar en colegios convencionales, fue en el centro de atención especial Melania Morales de su natal Managua donde realmente pudo fortalecer sus habilidades. En ese colegio, al que ingresó en 2012, le reconocieron como excelencia académica.

“Ahí le enseñaron braille, lo básico, y la secundaria la estudió en un colegio regular, él usaba una máquina para sus apuntes que los hacía siempre en braille; los profesores se adaptaron a su sistema“, relató la madre.

Ángel Gabriel Ruiz Alvarado estudia Educación Musical en la UNAN Managua, donde profundiza en sus habilidades musicales para transmitir el conocimiento a las próximas generaciones. Foto: Cortesía

A sus 19 años, Ruiz cursa el segundo año de la carrera de Educación Musical en la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua en Managua. “Creo que mi interés por la música nació en la iglesia”, dijo Ruiz a República 18.

“Yo siempre observaba el coro, cómo cantaban, y me llamaba la atención”, explicó. Le enseñaron guitarra y empezó a integrarse al coro. “En la primaria nos ponían a cantar, teníamos clases de música y conocí a un profesor que me ayudó a desarrollarme más”, agregó.

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El joven Ruiz es ávido apreciador de música clásica, pero balancea a Mozart y a Beethoven con músicos populares de los setenta, músicos de habla hispana como Camilo Sesto y Emmanuel. Exhibe una agudeza auditiva para muchos envidiable.

“Muchos se quedan algo impresionados por mi capacidad de escuchar en qué tono van las canciones sólo con escucharlas; es algo que se me da bastante bien y que no lo tenía tan consciente, pero que fui descubriendo conforme fui aprendiendo”, dijo el joven.

Alvarado en una presentación musical en su colegio. Foto: Cortesía

Según contó Ruiz, en la universidad “ha habido facilidades” para permitirle adaptarse mejor al campus. “La UNAN está trabajando bastante, según he observado, en la inclusividad. No soy la única persona, hay como tres o cuatro personas ciegas en la carrera”, apuntó.

El mayor reto recae en el asunto de la autonomía. “Lo que es la movilidad es algo que todavía estamos trabajando, pero no ha sido tan difícil, porque hay herramientas” y aseguró que en secundaria, cuando aún no se había instruido o no tenía la disponibilidad de algunas utilidades, fue más difícil la adaptación.

Para Ruiz sus habilidades musicales han supuesto parte del sustento económico. Foto: Cortesía

Aunque dijo no cerrarse a la posibilidad de grabar un álbum a futuro, el joven Ruiz cree que su vocación está en la enseñanza. “Lo mío no es la composición, sino la interpretación y la principal razón por la que escogí la carrera fue para enseñar“, aclaró.

“Desde quinto año me propuse la meta de que lo que yo escogiera (como carrera) tenía que ser para enseñar y ahí fue donde vino el reto, o el dilema, porque yo estaba por estudiar matemáticas o música; son dos cosas que me gustan bastante“, pero Ruiz no se sintió satisfecho con los prospectos laborales de una carrera en matemáticas.

“Yo no quería las matemáticas para estar en una empresa. Por mucho que fuera un buen ingreso económico, sabía que no me iba a sentir cómodo y mi principal aspiración es adquirir el mayor conocimiento posible y transmitirlo a otros“, explicó.

Actualmente, Ruiz hace gala de sus habilidades musicales tocando en eventos. Su madre habla de él con orgullo en la voz y es seguro que, con el tiempo, dejará huella en ese arte que tanto ama.