Guerra del régimen contra universidades ha afectado a cerca de 43 mil estudiantes
27 universidades en todo el país han sido clausuradas o usurpadas por el régimen sandinista
El Centro de Estudios Transdisciplinarios de Centroamérica (CETCAM) advirtió en el número más reciente de su boletín político Perspectivas “las consecuencias que tendrá el control de la dictadura Ortega-Murillo sobre la educación superior” en Nicaragua.
En el documento se denuncia que la política hostil en contra de las universidades independientes de Nicaragua, de las cuales 27 han sido clausuradas o confiscadas, es “anular la capacidad de pensamiento” a escala nacional.
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Estas acciones han afectado a cerca de 43 mil estudiantes nicaragüenses, estima el boletín, quienes ahora buscan oportunidades fuera del país, efectivamente drenando el talento nacional. CETCAM señala en su boletín que las consecuencias de su guerra contra la educación superior “no han sido previstas ni por la propia dictadura”.
“El acelerado control que los Ortega-Murillo han venido imponiendo sobre las universidades y otros centros educativos apunta a un modelo de adoctrinamiento más que de educación“, señala el boletín, que llamó a la acusación de “terrorismo” y posterior usurpación de la Universidad Centroamericana (UCA) en agosto “uno de los últimos zarpazos de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo“.
Según postula el boletín, las confiscaciones y reestructuraciones siguiendo líneas partidarias en las universidades responden a que “el descontento ciudadano se ha extendido y profundizado entre toda la población, pero especialmente entre las nuevas generaciones de jóvenes“, lo que hace necesario, en la lógica del régimen, ejercer un control mayor centralizando la administración de estos centros hacia el Estado.
“Convertidas en centros de adoctrinamiento más que de educación superior, el control de las universidades por parte del régimen orteguista tiene implicaciones para el desarrollo del país porque afecta directamente la calidad de la educación superior, que ya se encontraba en condiciones difíciles“, lamenta el equipo de CETCAM en el boletín.
CETCAM diagnostica que las próximas generaciones de profesionales “saldrán a la calle con serias deficiencias y su rendimiento profesional será bajo”, así como también consideran que la capacidad de investigación decrecerá en tales condiciones.
“El desarrollo de disciplinas del área de las humanidades y las ciencias sociales” se verá particularmente afectado en un país ya de por sí poco habituado a esas disciplinas.
