“Los caminos del Señor son distintos a los nuestros”, dice Cardenal Brenes tras destierro de sacerdotes
Activistas reiteraron que no se trata de una liberación, sino de un destierro, lo que constituye un crimen de lesa humanidad.
El cardenal nicaragüense, Leopoldo Brenes, también reaccionó al destierro de 19 religiosos, incluyendo a los obispos Rolando Álvarez e Isidoro Mora, asegurando que fue gracias a negociaciones entre el régimen y la Santa Sede y que “los caminos del Señor son distintos a los nuestros”
De esta forma, Brenes rompió el silencio que mantuvo durante meses sobre el arresto del Obispo Álvarez y otros 18 religiosos, entre estos, 15 sacerdotes y dos seminaristas, que fueron enviados a El Vaticano.
“Luego de un diálogo entre el Gobierno de Nicaragua y la Santa Sede, se acordó trasladar a Roma a Mons. Rolando, a Mons. Isidoro, a Sacerdotes y dos Seminaristas. Los caminos del Señor son tan distintos a los nuestros y en determinadas situaciones nos pide una respuesta: “Aquí estoy Señor para hacer tu voluntad”, señaló Brenes.
Más temprano, Brian Nichols, subsecretario de Estado de Estados Unidos para asuntos del hemisferio occidental, aseguró que la excarcelación “tranquiliza”, pero que continúan exigiendo la liberación de todos los presos políticos.
“Ortega-Murillo expulsaron hoy a 19 clérigos católicos injustamente detenidos, incluyendo al Obispo Álvarez. Nos tranquiliza ver la liberación de estos líderes religiosos. Todas las personas tienen derecho al culto en casa y en el extranjero. Continuamos llamando a la liberación de todos los injustamente detenidos y al restablecimiento de las libertades fundamentales del pueblo nicaragüense”, dijo Nichols, en su cuenta de X.
“Es una derrota para la dictadura”
La activista Haydeé Castillo consideró el destierro como una “derrota” para la dictadura de Nicaragua.
“Este es un triunfo para nuestro pueblo en resistencia. Es una derrota para la dictadura que ya no puede sostener sus mentiras. Ahora vamos a tener más fuerzas para luchar por el resto de los presos políticos que quedan en las cárceles”, dijo Castillo.
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Castillo reiteró que no se trata de una liberación, sino de un destierro, lo que constituye un crimen de lesa humanidad.
“Esta no es una liberación, es un destierro, por lo que constituye un crimen de lesa humanidad. Pedimos a la comunidad internacional no naturalizar este destierro”, señala.
Según varias organizaciones sociales en un comunicado, la dictadura “no soportó” la presión internacional por el encierro de religiosos.
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“Constatamos que la dictadura, no puede resistir la presión de la Iglesia Católica Universal y del pueblo de Nicaragua en resistencia. Ellos saben que su ataque a nuestra fe, les acarrea gravísimas consecuencias y opera cada día en contra de ellos mismos”, señala un comunicado firmado por la Alianza Cívica, el Espacio de Diálogo, entre otras organizaciones.
Un poema por la excarcelación
La poetisa Gioconda Belli compartió un poema en su cuenta de X, en el que destacan la valentía de los sacerdotes desterrados de Nicaragua.
Este es un fragmento del poema:
Llegan a Roma
al viaje no deseado.
A cambio de salir del duro calabozo
del encierro vil y desalmado
tenían que aceptar ser desterrados.
Negados de su Patria,
condenados sin haber pecado
dejan parroquias, fieles;
los rostros conocidos y queridos
las almas que cuidaban, dedicados.