Hijo de preso político dedica excelencia académica a su padre

Jeiby Bonilla González, hijo del profesor y preso político del régimen sandinista, Jimmy Bonilla, recibió el reconocimiento de excelencia académica al mejor alumno de secundaria nivel nacional el pasado martes, 14 de noviembre. El joven dedicó este triunfo a su padre in absentia ante medios oficialistas.

“Este triunfo no es solo mío también, es de cada uno de todos ustedes, y por la ausencia de mi papá yo se lo dedico a él también“, dijo el joven estudiante de undécimo grado durante un acto cultural en reconocimiento suyo celebrado en su natal Nandaime, municipio del departamento de Granada.

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El joven también agradeció a su madre, a sus hermanos, a su abuela, “quien me enseñó a leer desde pequeño”, y a sus docentes. Bonilla ya había participado en certámenes departamentales y nacionales de excelencia académica, como el de lectura en voz alta cuando estaba primer grado, así como el certamen nacional para mejor alumno de primaria.

El pasado 5 de abril, en pleno miércoles santo, Jimmy Antonio Bonilla Gutiérrez fue detenido junto a su tío, Emmanuel Gutiérrez, para posteriormente ser ambos acusados de haber participado en una procesión que se realizó sin el debido permiso del régimen de Daniel Ortega, que a través de la Policía Nacional había orientado meses antes, «por razones de seguridad», la proscripción de toda aglomeración en el contexto de la Semana Santa.

Reconocidos educadores

Bonilla se desempeñaba como profesor de matemáticas en Nandaime. Gutiérrez era también educador con amplia trayectoria en ese municipio. Los dos eran reconocidos en Nandaime por su labor en la educación de la juventud local.

La acusación en su contra vendría asociada al hecho de que habían pedido permiso para realizar una tradicional procesión de miércoles santo en Nandaime, pero al recibir la negativa de la Policía, ambos desistieron y más bien instaron a la población a no celebrarla tampoco, según había revelado anteriormente una fuente cercana a República 18.

Sin embargo, ambos fueron recluidos en el centro penitenciario La Modelo, en Tipitapa, a pesar de que no tuvieron nada que ver con la procesión que se realizó. Testigos y una fuente cercana confirmaron a República 18 que ninguno de los dos había participado en el evento religioso en cuestión, mismo en el que fue apresado el periodista Víctor Ticay mientras brindaba cobertura.

Ni Bonilla ni Gutiérrez aparecen en la lista oficial del Mecanismo para el reconocimiento de las personas presas políticas de Nicaragua, presuntamente porque su familia teme represalias del régimen si colaboran con esa instancia.

Bonilla, de 39 años, padece de hipertensión y Gutiérrez, a sus 75 años, se encuentra en particular riesgo ante las crueles condiciones de prisión que impone el régimen sandinista. A sus familiares sólo les permitieron la visita después de 4 meses de su detención y, al momento de publicarse esta nota, no se ha vuelto a saber sobre ellos públicamente.