Imprudencia y pobre infraestructura: combo mortal para conductores de Managua
Managua nunca está preparada para recibir la temporada lluviosa y la Policía Nacional no hace cumplir sus propias normativas.
La muerte de un ciudadano arrastrado por las fuertes corrientes de un cauce el pasado 29 de mayo pone una vez más en discusión el asunto de la infraestructura de la capital y sus alrededores ante la llegada de la temporada lluviosa, así como también el comportamiento de quienes transitan a través de zonas inundadas.
Alberto Uriel Romero, de 48 años, falleció en el sector de Valle Gothel en Nindirí, cuando su vehículo, una camioneta de doble tracción, fue arrastrada por las fuertes corrientes de un cauce. Algunos usuarios en redes sociales calificaron su actuar de imprudente, mientras otros se solidarizaron con sus familiares.
Otros conductores que cruzaron el mismo cauce desbordado después de ocurrida la tragedia, a como pudo verse en videos que circularon en redes sociales, un acto ilegal según la normativa de la Policía Nacional.
Imprudencia está penada
Los protocolos de la Policía Nacional para tratar desastres, establecidos en octubre de 2022 durante el tránsito del huracán Julia, facultan a la Policía Nacional para procesar penalmente a quienes “conducen medios de transporte y actúen con imprudencia y ponen en riesgo sus propias vidas y las de los demás“.
Fundamentándose en las leyes 872 y 337, la Policía se facultó para llevar a cabo retenciones de vehículos, arrestos y suspensiones de licencia contra conductores imprudentes en tiempo de lluvia, incluyendo aquellos que crucen cauces desbordados.
Sin embargo, el exconcejal y excandidato liberal a la alcaldía de Managua, Alfredo Gutiérrez, aseguró a República 18 que esa normativa “jamás se aplicó“.
Normas no se aplican
“Es una medida que no tiene capacidad de implementación porque, cada vez que llueve, se desbordan los cauces en Managua y muchas zonas principales se inundan”, lo que obliga a muchas personas a transitar con sus vehículos a través de la corriente.
“Esa medida es un mamarracho más que una norma seria que pueda tener credibilidad e implementarse correctamente” dijo el exconcejal, quien también señaló que, de llegar a implementarse, no duda que sería parte de “la misma campaña que ya raya en lo criminal de buscar cómo exprimir los bolsillos de los nicaragüenses“.
El exconcejal hace referencia al excesivo número de multas a través de las cuales la Policía Nacional recauda millones de córdobas cada año, aunque las cifras de accidentes no disminuyen.
Gutiérrez, por tanto, asegura que el problema yace más en la pobre infraestructura de la ciudad, que es “arcaica, de los tiempos de Anastasio Somoza (Debayle)” y que, más allá de unas cuantas mejorías puntuales y menores, “no ha sido tocada en 25 años“.
Lo que, combinado con lo desfasado de la infraestructura, “hace que se inunde” la ciudad, concluyó el exconcejal.
