Entre la economía y la literatura: la historia del joven activista Marco Aurelio Peña

Actualmente tiene 35 años. Este año cumple tres años en el exilio en Costa Rica donde es director ejecutivo de la Iniciativa Puentes por los Estudiantes de Nicaragua (Ipen)

  • 1:33 pm
  • Ago 8, 2023
República 18

Marco Aurelio Peña Morales, es un joven profesional nicaragüense que aunque nació en Managua, la capital de Nicaragua, se considera un “jinotegano” porque su madre es oriunda de Jinotega. Actualmente tiene 35 años y ha estudiado dos carreras universitarias: “siempre digo que Derecho fue mi primer matrimonio y descubrí un amor con Economía, la misma profesión de mi papá pero me tomó mi tiempo descubrirlo”, dijo Peña a República 18.

A su vez confiesa que en su primer carrera Derecho cursada en la Universidad Centroamericana (UCA) tuvo a mitad de la misma un “impasse” producto de una crisis vocacional. Compartió que le gusta la lectura, el cine, el futbol y disfrutar el tiempo con sus amigos.

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Antes del estallido de la crisis sociopolítica agudizada por la brutal represión del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo desde abril de 2018, él estudiaba la Maestría en Desarrollo Económico en la UNAN – Managua, era asesor externo de una entidad bancaria nacional y también era estudiante de Economía como segunda carrera.

Tiene 35 años, antes de salir de país se dedicó a ser asesor externo en instituciones bancarias del país. Primero estudió Derecho en la Universidad Centroamericana (UCA) donde vivió un “impasse” a la mitad de la carrera ante una crisis vocacional. “No me sentía realizado, pleno, valorado, finalmente termine la carrera porque era becado igual mis padres habían hecho mucho para profesionalizarme e inclusive había declinado de la propuesta de mi mamá de que saliera del país para irme a EE.UU. porque quería quedarme estudiando en mi país”, aseguró y a su vez, agregó que siempre estuvo dentro de los tres mejores estudiantes desde primaria, secundaria y universidad.

Dijo que su inspiración la adquirió por un tío, el hermano de su mamá. “Él falleció por cáncer, me pareció una carrera que podía ejercerla por mi propia cuenta, me permitía tener independencia en muchas maneras. Aunque en mi caso me decepcione mucha cosas porque Nicaragua ha sido un país con un Estado de derecho deficiente y ahora destruido, anulado, es un Estado de excepción permanente”, sostuvo.

Cofundador de Acción Universitaria

Antes de 2018, Peña disfrutaba el tiempo con sus amigos, de su independencia y sus logros académicos.

“Había logrado muchas cosas con mi familia siendo abogado y uno iba caminando en un país como Nicaragua a pasos lentos pero importantes, de la niñez a la adolescencia, de la adolescencia a la adultez, ayudando lento”, resaltó.

Destacó que era representante estudiantil por cinco años que lo conectó con la autonomía universitaria y con la libertad de pensamiento y el derecho a la educación de calidad. “Yo me autoconvoqué siendo un oficinista, me sensibilice mucho con muchos estudiantes universitarios que estaban preocupados por la deriva autoritaria del FSLN, me autoconvoqué un viernes 20 de abril en una marcha ciudadana y pacífica en carretera Masaya”, afirmó.

Marco Aurelio Peña en marchas opositoras en Nicaragua. Cortesía

De hecho dice que estuvo en la madres de todas las marchas el 30 de mayo y en la marcha de las flores.

“Me sumé en el pleno desarrollo de los acontecimientos, me sume a la Coordinadora Universitaria por la Justicia y la Democracia (CUJD) a finales de julio de 2018, luego estuve en los primeros grupos Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB) y cofundé Acción Universitaria, porque yo me presenté a la UNAN ocupada para conocer a quienes estaban ahí, para saber por qué estaban atrincherado y aportar a la causa que era genuina y legitima”, apuntó.

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Acción Universitaria nació para “demandar autonomía universitaria, despartidización de las universidades públicos, el reintegro de los universitarios expulsados, y para visibilizar el liderazgo juvenil”. También impartió clases en la Universidad Paulo Friere y la Universidad Juan Pablo II, ambas confiscadas por el régimen orteguista.

El 11 de enero de 2019 fue apresado por oficiales de la Policía orteguista por haber comparecido en conferencias de medios. “Iba almorzar a un lugar donde los estudiantes comían en la Colonia Miguel Bonilla, parqué el carro, cerca del comedor de la UNAN Managua y ahí me hacen un operativo, se parquea un vehículo blanco y un motorizado se bajó me mostró un arma, me amenazó y me dijeron que saliera del vehículo no accedí y me golpearon para que entrara. Me encapucharon, me ensangrentaron y me llevaron a las antiguas instalaciones de El Chipote”, recordó.

Denunció que lo tuvieron en una celda provisional durante cuatro horas, estuvo en la celda 38 y el compañero de celda era Edder Muñoz, y al lado estaba Freddy Navas y Miguel Mora. Estuvo preso durante una semana y salió por la interposición de un recurso de amparo lograron sacarlo.

Su exilio en Costa Rica

Su trabajo como consultor en la extinta Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social (Funides) en el área de Justicia Transicional y en Economía lo terminó obligando a salir del país.

“En 2021 se puso fea (la situación), se comenzó a perseguir y criminalizar a Funides, hasta que dejó de operar, todo el equipo salió del país cuando vinieron las capturas masivas yo me resguardé y seguí impartiendo clases como docentes donde tuve como estudiantes a muchos líderes juveniles (…) en la Universidad Paulo Freire. Tuve que salir, ya me sentía muy inseguro, personas cercanas a mi alrededor estaban pasando en inseguridad”, mencionó.

Peña salió al exilio a Costa Rica el 4 de noviembre de 2021, en el contexto represivo previo a las cuestionadas elecciones presidenciales.

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“Hasta ese momento me había resistido dejar mi país porque sentí que me iba corriendo mientras otros se quedaban, segundo porque tenía pendiente mis estudios y por último, porque cuando uno tiene ciertos avances tanto profesionales y un patrimonio familiar tiene ciertas raíces, y el no querer salir por la autoridad autocrática de unas personas”, advirtió.

El economista y abogado nicaragüense compartió que tenía tres lugares de destino Costa Rica, Canadá y Estados Unidos. Sobre qué ha sido lo más difícil que le ha tocado vivir contó que ha sido la adaptación. “Se pone a prueba la resiliencia, paciencia de que haya más estabilidad psicológica porque uno viene de un contexto de violencia porque uno deja a sus amigos, su familia”, aseveró.

Marco Aurelio Peña es un refugiado en Costa Rica. Cortesía

A su vez apuntó que las amistades de personas nicaragüenses y costarricenses que facilitan las cosas es muy fundamental. Peña es director ejecutivo de la iniciativa Puentes por los Estudiantes de Nicaragua (Ipen) fundado en agosto de 2022 la nación del sur a favor de los jóvenes universitarios con limitaciones económicas y afectados por la situación política del país y de derechos humanos.

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“Nació con tres ejes estratégicos una gestión de oportunidades de estudios técnicos superiores llamado Puentes, el segundo, ayuda humanitaria para quienes estén estudiando y deseen estudiar se llama Amistad y el último, el propiciar actividades de formación, liderazgo, cursos de idioma que se llama Fuerza. El radio de acción está en Nicaragua y Costa Rica. El proyecto es parte de continuidad por el derecho a la educación, por la libertad de catedra y vi de cerca la violación a la autonomía universitaria”, concluyó.