Biden renueva estatus de “amenaza para la seguridad nacional” de Nicaragua por quinto año consecutivo

La Presidencia de los Estados Unidos renovó para un año adicional el estatus de “amenaza para la seguridad” que aprobó para Nicaragua el pasado 27 de noviembre de 2018 por medio de la Orden Ejecutiva 13851 en el marco de la Ley para poderes económicos internacionales (50 U.S.C. 1701 et seq.).

La decisión fue anunciada por medio de un comunicado de la Casa Blanca este jueves, 16 de noviembre, pero el presidente Joseph Biden la había decidido el pasado 7 de noviembre. La notificación fue publicada en el registro federal de Estados Unidos y transmitida al Congreso de ese país.

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“El continuo desmantelamiento y socavamiento sistemático de las instituciones democráticas y el estado de derecho por parte del régimen Ortega-Murillo, su uso de violencia indiscriminada y tácticas represivas contra civiles, así como su corrupción que conduce a la desestabilización de la economía de Nicaragua, continúa planteando una inusual y extraordinaria amenaza a la seguridad nacional y la política exterior de Estados Unidos“, declaró el presidente Biden.

Este estatus ha sido extendido en cinco ocasiones desde 2018, año en que inició la crisis sociopolítica que vio al régimen sandinista de Daniel Ortega desatar la violencia en contra de sus opositores. El 24 de octubre de 2022, la Orden Ejecutiva 14088 impuso mayores restricciones a la inversión de Estados Unidos para con Nicaragua, tanto la estatal como la privada.

Sin embargo, al estar estas disposiciones sujetas “a determinación de la Secretaría del Tesoro y a consulta con el Secretario de Estado y el Secretario del Comercio”, la realidad es que la inversión extranjera estadounidense hacia Nicaragua se ha mantenido como la más fuerte incluso a pesar de una reducción de hasta un tercio en el último año.

Estados Unidos no disuade al mundo

En términos netos, las empresas estadounidenses invirtieron 178.7 millones de dólares en relación al mismo periodo del año pasado.

Aunque estos números suponen una reducción del 38.09%, la inversión estadounidense sigue siendo la mayor de todas las fuentes de capital privado en el país, que en 2022 vio su segundo mejor año desde 2018 en cuanto a inversión extranjera para Nicaragua se refiere.

La advertencia de los Estados Unidos tampoco parece disuadir a otras instituciones de apoyo. El pasado 6 de septiembre, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) aprobó el nuevo Programa País para Nicaragua (2024-2028), con un presupuesto que asciende a unos 25 millones de dólares.

El documento del programa no mencionó la grave crisis de derechos humanos iniciada por la represión del régimen de Daniel Ortega contra la oleada de protestas en 2018, a pesar de que Naciones Unidas denunció al régimen como responsable de crímenes de lesa humanidad en marzo de este año.