¿Cómo llega Nicaragua al Día del Trabajador a cinco años de crisis sociopolítica?
Más de un tercio de la población activa de Nicaragua recibe el día del trabajador de 2023 en condición de subempleo.
El día del trabajador llega a Nicaragua con, al menos, un 3.2% de la población activa en situación de desempleo, según los datos más recientes del Instituto Nacional de Información de Desarrollo (INIDE) publicados en febrero de 2023.
Los datos muestran una mejoría en relación a los últimos cinco años que, contrastando con datos del Banco Mundial, vieron un aumento de la tasa de desempleo de 3.3% hasta 5.9% entre 2017 y 2021 producto de la crisis política iniciada en 2018.
Sin embargo, estas cifras enmascaran la realidad laboral de una buena parte de la sociedad nicaragüense. En el subempleo, definido comúnmente como trabajos esporádico y/o remunerados por debajo del mínimo, cae un 36.3% de la población activa de Nicaragua según los mismos datos del INIDE para febrero de 2023.
“El nivel de subempleo, desde el punto de vista teórico, confirma cuando una persona gana menos de lo que debería estar trabajando en cuarenta horas” explica a República 18 el analista financiero y doctor en ciencias empresariales costarricense, Daniel Suchar.
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Para Suchar, la causa de tan alto subempleo recae en que “la inversión extranjera directa ha estado muy recelosa en Nicaragua y vemos que no se generan tantos puestos de trabajo. Recordemos también que existen factores externos como inflación y algunas sanciones”.
Por su parte el economista Nestor Avendaño explica que al menos desde hace cuatro décadas, el subempleo ha sido el principal problema estructural del mercado laboral de Nicaragua” .
Números contra vivencia
Pero aunque los datos de INIDE arrojen una cifra alta de población económicamente activa, la percepción del desempleo en la población es bastante más apremiante de lo que los números pudieran sugerir. “Este tipo de datos a menudo vienen manipulados” advierte Suchar y añade que “sabemos que hay una realidad muy clara en Nicaragua: estamos hablando de mucha informalidad”.
Esta realidad es quizá más palpable con otra estadística: más de 163.000 encuentros con nicaragüenses registraron en la frontera sur las autoridades migratorias de Estados Unidos, según informó Voz de América en febrero de 2023. Este flujo migratorio tiene una dimensión económica visible: en febrero de 2023, las remesas recibidas del exterior alcanzaron los 330.6 millones de dólares, 4.3% más que el mes anterior según datos del Banco Central.
Elisa Araúz, comerciante de León de 51 años, recibe una remesa de alrededor de cincuenta dólares una vez al mes. La envía un familiar cercano que partió de Nicaragua hace más de una década y, explica, “ayuda bastante. Aunque para la gente de allá eso sea poquito, acá ya es algo que ayuda a resolver”.
Salarios no dan abasto
Entre febrero y marzo de 2023, el precio de la canasta básica se redujo apenas unos 45 córdobas. Los 18 973 córdobas calculados para marzo por INIDE siguen superando en gran medida los salarios mínimos establecidos por la ley que, dependiendo del rubro, oscilan entre los 4 700 y 10 500 córdobas desde el último ajuste salarial del 1 de marzo de 2023. Tal ajuste apenas aumentó los salarios en un 10%.
La canasta básica se define como el requerimiento para cubrir las necesidades de un hogar de seis miembros y se calcula a partir de los promedios mensuales de los precios de cada uno de sus 53 elementos.
Por su parte, Araúz dice sentirse “asustada” porque ahora “en una salida a comprar cosas de la casa fácilmente se te van 40 dólares (más de 1400 córdobas)”. Asegura que las cosas se le dificultan más pues en su trabajo “no recibo un pago fijo. La gente paga por abonos; a veces sí, a veces no”.
Un día para la izquierda
El día del trabajador se estableció el 1 de mayo de 1889 durante el Congreso Obrero Socialista de la Segunda Internacional celebrado en París, Francia. La efeméride tenía la intención de recordar a un grupo de sindicalistas, los llamados “Mártires de Chicago”, condenados a muerte por el gobierno de Estados Unidos tras la huelga por la jornada de ocho horas en 1886.
La fecha es celebrada por todo el mundo por gobiernos de izquierda, entre los que se cuenta el de Daniel Ortega. Sin embargo, sus políticas estos últimos cinco años, y en particular su manejo de la crisis iniciada en 2018, son causa directa del duro golpe que tomó la economía nicaragüense y que a día de hoy se siente.
“Definitivamente estos lastres se vienen arrastrando desde la crisis de 2018” señala Suchar, añadiendo que “se siguen evidenciando problemas a nivel macro-económico”.
“Si bien el Producto Interno Bruto de Nicaragua apunta a un crecimiento, también debemos medir que existe todavía algún arrastre en algunos sectores de los cuales todavía no se ha generado una formalización como tal y he ahí donde también los indicadores de subempleo nos lo muestran” concluye Suchar.
