El día de ayer, por la tarde, llegó el cuerpo del nicaragüense, Eleazar Blandón, quien falleció en España por un golpe de calor mientras trabajaba en un plantío de sandía, en las cercanías de la localidad de Murcia.

En el Aeropuerto Internacional Augusto C. Sandino, se encontraban familiares del fallecido, quienes transportarían el cuerpo hasta Jinotega, de donde era originario Blandón.

Los familiares se reunieron con una delegación diplomática de España. El Gobierno del país ibérico y la Embajada de Nicaragua en España ayudaron con la repatriación del cuerpo.

Eleazar Blandón fue parte de los más de 100.000 nicaragüenses que tuvieron que salir del país, en su caso, para buscar el sustento que le ayudaría a mantener a su familia. España, ha sido el destino de muchos nicaragüenses que buscan trabajo, especialmente de los que viven en el norte del país.

El caso de Blandón despertó la alarma de organismos de derechos humanos en España sobre la explotación que viven los migrantes, principalmente latinos y africanos, que llegan a buscar una mejor vida.