Periodista ganador de Premio Rey de España: “Gracias a una beca de la UCA pudimos estudiar”

El lema “en todo amar y servir”, dice el periodista, “define a todos los que somos educados por los jesuitas”

  • 2:04 pm
  • Ago 18, 2023
República 18

Octavio Enríquez inició su carrera en e laño 2000, cuando apenas era estudiante de comunicación social en la Universidad Centroamericana (UCA). Fue con esa institución de inspiración jesuita que, en sus palabras, «mantuve una relación constante; fui educado prácticamente toda mi vida por los jesuitas».

Enríquez, nacido en 1980, estudió la secundaria en el Instituto Loyola de Managua, de ahí asegura tener “una visión muy clara de cómo la Compañía de Jesús enfoca la educación hacia valores y por eso rechazo todo lo que está ocurriendo”.

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Y lo que ocurre no es poca cosa. Tras 63 años de funcionar como la más prestigiosa institución de educación superior en el país, la UCA fue tomada por la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo el miércoles, 16 de agosto. La acusación, elevada por la jueza sandinista Gloria María Saavedra Corrales, es por “terrorismo”, algo que Enríquez califica de “ilegal, porque está basado en una mentira”.

Su experiencia de la educación jesuita dista mucho de cualquier definición de terrorismo. “Lo que te enseñan es la importancia de los valores, la consciencia social. Hay el dicho que para muchos es un estribillo con un significado muy profundo, una frase ignaciana, refiriéndose al fundador de la Compañía de Jesús, San Ignacio de Loyola, que dice: ‘En todo amar y servir‘”, explicó Enríquez a República 18.

Esa máxima define a todos los que somos educados por los jesuitas” considera Enríquez, quien estuvo en ambos lados del proceso educativo en la UCA. Primero como estudiante y luego, en 2015, como docente de prensa escrita para una generación posterior de comunicadores.

Construyendo a un periodista

Cuando estudiaba, Enríquez y su hermano gemelo, Emilio (fallecido en 2021), fueron beneficiados por una beca, algo común en la universidad hasta que tuvo que cortar ese beneficio cuando el régimen le negó su asignación del 6% del presupuesto dedicado a la educación en marzo de 2022.

“Él estudió derecho y yo comunicación, y fue gracias a ese apoyo que pudimos estudiar, gracias a la universidad yo pude iniciar mis prácticas en medios de comunicación”, señaló. La beca de Enríquez no fue cubrió toda su carrera, pero sí le permitió catapultarse hacia el periodismo con prácticas en en el semanario Confidencial.

Enríquez trabajó para el extinto El Nuevo Diario durante 6 años. También se desempeñó en La Prensa, ascendiendo de redactor hasta editor por más de una década entre 2006 y 2017. Desde entonces labora en Confidencial, así como también colabora con la plataforma de periodismo hispanoamericano Connectas, que publica sus investigaciones.

Enríquez durante la  la Conferencia Global de Periodismo de investigación, 2019. Foto: Cortesía

En esa trayectoria de dos décadas ha logrado reconocimientos como el Premio de periodismo Pedro Joaquín Chamorro y el Premio Ortega y Gasset, Rey de España, a la excelencia periodística de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP).

El atentado contra la UCA le ha hecho recordar sus raíces, echadas en esa institución hace tantos años.

Cuando vi que retiraban el Cristo de la capilla de la UCA, a mí me pareció simbólico. Ese Cristo se parece a toda Nicaragua y es inevitable que a uno se le revuelvan los sentimientos.

—Octavio Enríquez, periodista

“Están atentando contra el centro de pensamiento con mayor trayectoria y prestigio en el país; sus programas sociales, su oferta educativa, han tocado un montón de corazones en comunidades” de todos los estratos sociales, no exclusivamente de la burguesía como alude la propaganda sandinista, opinó Enríquez.

“Por eso las reacciones que podés ver en redes sociales son tan sentidas” explicó el periodista. “El paso de la UCA por la historia de este país fue inmenso, y por eso ves reclamos o expresiones de indignación y de dolor“, añadió.

Días difíciles

Enríquez expresó que estos días han sido difíciles para él y para muchas otras personas a quienes pasaron por la universidad, a la vez que señaló cómo hay casos de gente “en quienes la universidad no pasó, como el señor Edwin Castro“, diputado sandinista con una maestría en Derecho Constitucional y Derechos Fundamentales por la UCA, tan sólo uno de varios funcionarios que ahora dan la espalda a su alma máter.

Yo he estado huérfano de tranquilidad y de sosiego; me ha afectado mucho leer las noticias relacionadas a la universidad y me llega el recuerdo de cuando impartía clases en la UCA, clases eminentemente profesionales, orientadas por profesionales con ética que calaba en los jóvenes”, confesó.

Enríquez ha sido premiado tanto dentro como fuera de Nicaragua por su labor periodística. Foto: El País

Por fomentar el pensamiento crítico y una educación encaminada a principios humanistas, Enríquez valora que la UCA se había convertido en «un estorbo para el poder en un país donde no hay justicia».

“Aprecio el trabajo que la universidad ha hecho con decenas de miles de vidas que han marcado a lo largo de sus 60 años de operación” concluyó el periodista en tono sentimental.