Periodista nicaragüense denunció expulsión de toda su familia hacia Costa Rica

Briceño fue expulsado junto a sus hijos y esposa con pasaportes emitidos el propio día del operativo ilegal en su contra. Nadie le explicó por qué.

  • San José, Costa Rica
  • 12:03 pm
  • Dic 10, 2024

Briceño hizo la denuncia pública ante el Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca Más.

Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca Más
República 18

El periodista nicaragüense Henry Briceño denunció públicamente la expulsión de toda su familia hacia Costa Rica, acuerpado por el Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca Más en una conferencia virtual el lunes, 9 de noviembre.

El hecho ocurrió el 24 de noviembre de 2024 a horas de la tarde, cuando una veintena de oficiales de la Policía Nacional rodearon su vivienda en San Rafael del Sur, Rivas, donde también laboraba como pequeño empresario. Briceño denunció acoso y hostigamiento de parte de los agentes previo a su expulsión.

El régimen sandinista de Daniel OrtegaRosario Murillo intervino las cuatro propiedades del núcleo familiar de Briceño, entre ellas un hostal, un motel y un vivero. Posteriormente, los agentes llevaron a su familia —incluyendo a su hijo de 11 años— en patrullas hasta el puesto fronterizo de Peñas Blancas.

En la frontera fueron entregados a militares del Ejército de Nicaragua, quienes les indicaron una vía de tránsito entre ambos países. Debieron ingresar a territorio costarricense de manera irregular por una montaña cenagosa, pero una vez ahí fueron recibidos por las autoridades costarricenses, según Briceño con un “trato humano”.

Briceño, su esposa, su hija y su hijo menor habrían recibido todos pasaportes con fecha de emisión del 24 de noviembre, el día de su expulsión, de parte de las autoridades nicaragüenses. “Duele que te dejen en la calle. Hay llanto, hay dolor y hay incertidumbre“, lamentó el periodista.

El régimen sandinista no se ha referido públicamente al caso, que ocurre en medio de un repunte represivo en Nicaragua, en el que al menos una treintena de opositores ha sido encarcelada, según mecanismos de denuncia como Monitoreo Azul y Blanco consecuencia de varios operativos policiales simultáneos iniciados desde la segunda mitad de noviembre.

El destierro de opositores, en particular de presos políticos, es una estrategia que el régimen sandinista viene aplicando desde hace ya dos años, habiendo forzado fuera del país a más de 450 activistas, religiosos, periodistas, disidentes del sandinismo, personalidades del mundo del espectáculo y ciudadanos privados.