Allanan vivienda de periodista que denunciaba arbitrariedades en El Salvador
Mónica Rodríguez labora haciendo “una intensa denuncia de los abusos de poder en una cordillera que le está siendo despojada a sus comunidades”, según describió una colega.

Mónica Rodríguez, periodista salvadoreña.
La vivienda de la periodista salvadoreña Mónica Rodríguez fue allanada por agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) de El Salvador, según denunciaron ella misma, la Red Centroamericana de Periodistas (ARCP), entre otras organizaciones, y colegas vía redes sociales este jueves, 5 de diciembre.
Según el reporte de la ARCP, al menos cinco oficiales ingresaron al domicilio de Rodríguez, recabando información sobre Bálsamo Radio TV, medio para el que la periodista trabaja, y la Asociación Comunitaria Unida por el Agua y la Agricultura (ACUA).
“La casa de la periodista (Mónica Rodríguez) fue allanada por policías. Decomisaron computadoras y otros dispositivos tecnológicos de trabajo“, dijo vía Twitter (ahora X) la periodista Angélica Cárcamo. “Mónica junto a Bálsamo Radio TV hacen una intensa denuncia de los abusos de poder en una cordillera que le está siendo despojada a sus comunidades“, explicó.
También fueron retenidas memorias USB y las tarjetas de crédito de Rodríguez y su pareja. “Nos dicen que hay reserva del caso. Se han llevado una serie de elementos de trabajo de nosotros. Estamos preocupados por lo que pasa en el país y desconocemos el origen de esta situación“, dijo Rodríguez.
“Nosotros vamos a seguir trabajando denunciando lo que ocurre en nuestro país. Nos parece injusto este tipo de registro“, afirmó la periodista que, desde hace años, ha denunciado también los riesgos que corren periodistas y comunicadores bajo el gobierno del presidente Nayib Bukele.
#ALERTA| La periodista @MonikR84 habla sobre el registro efectuado la noche del miércoles 5 por agentes de la @PNCSV, en el que incautaron dispositivos tecnológicos que contenían información personal e institucional de Bálsamo Radio TV y @ACUAelsalvador. pic.twitter.com/PV4tkFTqTs
— Red Informativa de Arpas (@arpassv) December 5, 2024
Bajo el régimen de excepción de Bukele, las autoridades policiales en El Salvador operan con ciertas garantías constitucionales suspendidas con la lucha contra las pandillas que por décadas asolaron el país como justificación.
La medida fue establecida en respuesta a una masacre perpetrada por grupos delincuenciales el 27 de marzo de 2022 y ha sido renovada por la Asamblea Legislativa, con mayoría pro-Bukele, unas 24 veces. La última extensión caduca el 6 de diciembre y, hasta el momento, se contabilizan unas 81 mil detenciones, con 7 mil excarcelaciones por falta de pruebas.
Sin embargo, tanto la prensa salvadoreña como organismos defensores de derechos humanos y la oposición han criticado la medida, caracterizando la estrategia de Bukele como una deriva autoritaria violatoria de los derechos humanos y utilizada por el presidente para perseguir a sus oponentes políticos.
En agosto, Bukele mencionó la posibilidad de finalizar el Estado de excepción. “En el corto plazo, nosotros esperamos poder quitar el régimen de excepción, regresar a la normalidad en el término constitucional y poder mantener la paz que hemos logrado con simple actividad judicial y judicial normal“, pero la medida continuó siendo renovada.
El mandatario niega los señalamientos antes mencionados, alegando que “no hay ni una tan sola prueba de tortura” en los centros de detención, como también ha minimizado las acciones que las fuerzas de seguridad ejecutan contra periodistas y opositores de su gobierno.