Radio oficialista reporta el asesinato de 2 miskitos en una zona de Wiwilí, Jinotega
Según el reporte, los cuerpos presentaban orificios de bala, presuntamente de rifle calibre 22 y señales de haber sido atacados con machetes
Los ataques de colonos a comunidades indígenas son constantes en Nicaragua sin que las autoridades tomen medidas al respecto.
Los ciudadanos miskitos identificados como “Marlon Ocampo, de 30 años, y Guzmán Ocampo, de 27” fueron asesinados el viernes 8 de noviembre por presuntos “toma tierras” informó la oficialista radio La Primerísima.
Según la radio citada, el hecho ocurrió en la comunidad Sanibila, ubicada en la rivera del Río Coco, San Andrés de Bocay, en el Territorio Indígena Especial “Alto Wangki”, municipio de Wiwilí, Jinotega.
La publicación señala que “los hermanos fueron atacados luego de negarse a vender tierras a un grupo de hombres armados. Tras el crimen, los agresores enterraron los cuerpos de las víctimas”.
A su vez aseguraron que un equipo de la Policía, acompañado por algunos familiares de los fallecidos, realizó el lunes la “exhumación de los cuerpos”, los cuales presentaban orificios de bala, presuntamente de rifle calibre 22, y señales de haber sido atacados con machetes.
Apuntaron que “ante el temor de nuevas represalias, los familiares de las víctimas se han visto obligados a refugiarse en otras comunidades cercanas”.
Los hechos de violencia en contra de las comunidades indígenas no cesan, recientemente la Revista Indígena Centroamericana Prâhaku, denunció un fuerte enfrentamiento entre colonos y comunitarios indígenas que dejó presuntamente dos colonos muertos y tres indígenas miskitos heridos en la comunidad indígena Miskita Francia Sirpi, ubicada en el municipio de Waspam, en la Costa Caribe Norte de Nicaragua.
En ese caso República 18 no pudo confirmar de forma independiente el incidente y los medios oficialistas no se refirieron al caso. Sin embargo, a lo largo de los últimos años, organismos defensores de derechos humanos y de los pueblos indígenas han señalado que constantemente se registran agresiones violentas, como asesinatos y quemas de viviendas por parte de colonos, sin que las autoridades gubernamentales tomen medidas para proteger a los comunitarios.
