Llega a la Corte IDH denuncia por torturas y muerte en prisión del abogado Santos Flores Castillo

Una nota de prensa reciente de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) informó sobre la presentación del Caso 14.679 de Nicaragua, ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH), en busca de justicia “por la tortura infligida a Santos Sebastián Flores Castillo”, quien falleció mientras se encontraba privado de libertad.

Flores Castillo, abogado y notario público, denunció en 2005 que Daniel Ortega, había iniciado una relación con su hermana, quien en ese momento tenía 15 años, y con quien habría tenido una hija.

“Tras estas denuncias, Flores y su familia fueron objeto de persecución por parte del Estado. En 2013 fue condenado a 15 años de prisión por un delito que, según los peticionarios, fue fabricado en represalia por sus denuncias”, señala el informe.

Durante su encarcelamiento en el Sistema Penitenciario Nacional de Tipitapa, tanto Flores como su madre denunciaron torturas y condiciones inhumanas.

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“El 8 de noviembre de 2021, falleció en prisión por un supuesto infarto. Sin embargo, su familia alegó que presentaba lesiones, signos de tortura y desnutrición, lo que generó dudas sobre la versión oficial de su muerte”, explica el documento.

El Informe de Fondo de la Comisión documentó el aislamiento prolongado y las condiciones inhumanas de encarcelamiento que sufrió la víctima, incluyendo la falta de alimentación adecuada, agua potable y atención médica. Así mismo, la CIDH constató múltiples denuncias de torturas físicas y psicológicas por parte de agentes estatales, así como la privación de agua y alimentos, maltratos físicos, encadenamientos y abusos sexuales perpetrados por otros reclusos.

“Las marcas y heridas encontradas en el cuerpo de la víctima, junto con la falta de una autopsia concluyente, llevaron a la Comisión a determinar la existencia de elementos que indican tortura”, añade el informe.

Además, la CIDH verificó que, a pesar de las graves denuncias presentadas y la información proporcionada, el Estado no inició una investigación sobre las alegaciones de tortura y malos tratos. También tomó en cuenta el sufrimiento y la angustia experimentados por los familiares de la víctima.

La CIDH exhortó al Estado a “reparar las violaciones de derechos humanos mediante compensación económica y medidas de satisfacción por daños materiales e inmateriales”, así como a implementar un programa de rehabilitación y apoyo psicológico para los familiares de la víctima.

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También urgió realizar una investigación exhaustiva y efectiva que cumpla con los estándares internacionales y a adoptar medidas para prevenir la repetición de estas violaciones.

Del mismo modo, pidió garantizar asistencia médica adecuada para las personas detenidas, facilitar el contacto con sus familias, limitar el uso del aislamiento a casos excepcionales, emitir un mensaje claro desde las más altas autoridades sobre la prohibición de la tortura, y mejorar las condiciones de detención en la cárcel de La Modelo conforme a los estándares interamericanos.