Universidades públicas deberán pagar servicios básicos, estudiantes responden indignados
Dos jóvenes universitarios consultados por República 18 rechazaron la justificación del régimen para esta reforma, que alega motivos ambientales.
Las universidades públicas ahora deberán pagar por los servicios básicos (agua, electricidad, telefonía, etc.) que utilicen gracias a una reforma a la Ley (89) de autonomía de las instituciones de educación Superior aprobada por unanimidad en la Asamblea Nacional controlada por el sandinismo este miércoles, 25 de septiembre.
En concreto, la reforma lidia con el artículo 55 de le ley, que rige el “patrimonio de las universidades y centros educativos técnicos superior”. Previo a la reforma, el artículo garantizaba que los centros de educación superior estarían “exentos del pago de los servicios públicos, los que le serán brindados de manera gratuita por el Estado y sus instituciones”. Esto ya no será así.
Lea además: Estudiantes de universidades confiscadas ponen todo su esfuerzo por terminar sus carreras
Ángela Espinoza, diputada sandinista y presidente de la Comisión de educación de la Asamblea, intentó justificar la reforma apelando al medio ambiente. El razonamiento es que, debiendo pagar las universidades estos servicios, escatimarán más y en consecuencia habrá un ahorro.
“Esta reforma llevará a nuestras instituciones de educación superior a ser más amigables con el medioambiente, ahorrando energía, el vital líquido como lo es el agua y la telefonía. De manera que las instituciones de educación superior deben de tomar las medidas necesarias, a fin de cumplir con el pago de estos servicios”, dijo Espinoza.
El mismo artículo establecía la asignación del 6% del presupuesto nacional a las universidades públicas. La reforma modifica el artículo, estableciendo ahora que ese porcentaje “debe calcularse sobre el total de los ingresos ordinarios y extraordinarios establecidos en el Presupuesto General de la República para el año correspondiente, independiente del origen de dichos ingresos“.
“Me enoja. Es una de las tantas cosas que dicen hacer para ser más amigables con el medio ambiente cuando claramente es un robo”, dijo a República 18 una joven universitario nicaragüense que optó por el anonimato por razones de seguridad. “Quieren venir y ponerle una estampa verde a algo que claramente no lo es“, agregó.
Otro estudiante universitario, igualmente bajo anonimato por temor a represalias, tildó de “hipócrita” la medida, teniendo en cuenta el terrible historial que tiene el régimen en cuanto a la situación del despale de la territorio nacional. “Es insignificante lo que afecta una universidad al medio ambiente comparado con lo que ha hecho la dictadura con nuestros recursos naturales”, añadió el joven.