Colombia rescata a 33 migrantes que iban rumbo a Nicaragua
La ruta marítima desde el archipiélago de San Andrés y Providencia es considerada de alta peligrosidad debido a la actividad del crimen organizado y aguas inclementes.
Un barco al servicio de la Armada colombiana. Imagen de referencia.
La Armada colombiana rescató a 33 migrantes, entre ellos 6 menores de edad, que viajaban en dos embarcaciones diferentes en aguas del archipiélago de San Andrés y Providencia, con rumbo a Corn Island, en la Región Autónoma del Caribe Sur de Nicaragua. Así lo informó la institución este jueves, 19 de septiembre, a través de un comunicado.
Los migrantes seguían una peligrosa ruta marítima para evadir la peligrosa selva del Darién en Panamá. Según las autoridades colombianas, la embarcación era manejada por dos colombianos y transportaba a 10 adultos y 3 menores venezolanos; 6 indios; 2 ecuatorianos y un colombiano.
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Los conductores fueron detenidos y enfrentan una acusación por tráfico de migrantes. Otro rescate ocurrió cerca de la isla de San Andrés, rescatando en esa ocasión a 11 venezolanos, incluyendo 3 menores de edad, quienes presuntamente habían sido abandonados por quienes conducían la embarcación.
La Armada destacó que “las condiciones meteo-marinas en el archipiélago durante los últimos días no han sido favorables, presentándose tiempo nublado con alta probabilidad de lluvias y tormentas eléctricas dispersas que disminuyen la visibilidad en el mar, poniendo en peligro la integridad de quienes deciden emprender este viaje sin las condiciones de seguridad mínimas“.
Con estos rescates ya las autoridades colombianas suman 216 migrantes encontrados en esa ruta. Según datos oficiales, en lo que va del año unos 244 mil migrantes han cruzado las aguas del Caribe rumbo a Nicaragua, desde donde continúan su viaje hacia Estados Unidos.
Aunque se ha registrado un descenso respecto al año anterior, la cifra sigue siendo muy elevada considerando la alta peligrosidad de las aguas. Los migrantes que optan por esta ruta enfrentan el peligro de secuestro ante las actividades del crimen organizado, así como encaran clima peligroso en navíos poco aptos para la navegación en aguas profundas.
Desapariciones y naufragios de traficantes de migrantes son comunes, a tal punto que la ruta es considerada tan peligrosa como el tránsito por la selva del Darién en Panamá.
