Compactación estatal del régimen de Ortega: entre la reducción de gastos y el incremento del temor en sus círculos

CETCAM, señala que de acuerdo a diferentes análisis, la decisión de compactar y despedir grandes cantidades de empleados públicos se debe a las dificultades del régimen para sostener el gasto público e incrementar el temor dentro de sus círculos. 

  • San José, Costa Rica
  • 12:39 pm
  • Sep 17, 2024

Uno de los casos de purga interna más reciente incluye acciones en contra de Carlos Fonseca Terán hijo de uno de los fundadores del partido sandinista.

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República 18

El más reciente boletín del Centro de Centro de Estudios Transdisciplinarios de Centroamérica (CETCAM), señala que en las semanas más recientes, el círculo de poder en Nicaragua se ha visto sacudido hasta los cimientos por las purgas de altos funcionarios públicos y que ya han tocado incluso a oficiales de primera línea en el ejército.

Detalla que los expulsados del círculo de lealtades han recibido un tratamiento humillante cuando no han sido enviados a la cárcel acusados de corrupción.

“A este remezón, se suma el despido de decenas de trabajadores estatales después que la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo anunciaran la compactación y reestructuración del aparato estatal”, señalan.

Insisten que al terror y la incertidumbre en el círculo de poder y las instituciones públicas se agrega una nueva escalada del régimen en contra de las organizaciones sociales e iglesias con cancelaciones masivas de personerías jurídicas, confiscaciones y nuevos ataques.

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“Altos funcionarios públicos, oficiales de primera línea de la policía y el ejército, magistrados y jueces del poder judicial, alcaldes y secretarios políticos del FSLN, entre otros, han perdido el sueño”, expone CETCAM

Según este centro de pensamiento, a los funcionarios les afligen las noticias de la caída en desgracia, humillaciones y encarcelamiento de muchos de ellos en las semanas más recientes.

“Seguramente no duermen repasando si han dicho o hecho algo que pudiera provocara la desconfianza de los dictadores.Examinan las listas de purgados y buscan pistas para anticipar si están expuestos a algo similar en su futuro inmediato”.

2 mil trabajadores públicos despedidos hasta agosto 2024

Ejemplifican que el caso más reciente es el de un grupo de fieles militantes sandinistas encabezados por Carlos Fonseca Terán, hijo del fundador del partido Frente Sandinista (FSLN), con su mismo nombre, fueron encarcelados y acusados de corrupción y malversación de fondos. 

“El grupo denominado La Comuna, intercambiaba opiniones en un chat de WhatsApp, ocho de ellos se encuentran en la prisión y solamente Fonseca Terán tiene arresto domiciliario”, aseguran.

De hecho, para finales de agosto, al menos 2 mil trabajadores públicos habían sido despedidos de distintas instituciones, provocando gran temor entre el personal que permanece porque no saben qué día llegarán a sus puestos solamente a recibir la carta de despido.

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CETCAM, señala que de acuerdo a diferentes análisis, la decisión de compactar y despedir grandes cantidades de empleados públicos se debe a las dificultades del régimen para sostener el gasto público y un aparato estatal extremadamente grande que creció de unos 40 mil trabajadores en 2007 hasta cerca de 111,600 a mediados del presente año.

De igual modo persiguen incrementar el temor entre los empleados públicos, así como los más cercanos al círculo del poder. En el corto plazo, los despidos masivos y las “depuraciones” generan más desempleo y descontento entre la población, pero sobre todo entre los simpatizantes y trabajadores públicos. 

CETCAM, señala que los dictadores saben que a medida que purgan a más personas, generan nuevos y multiplicados agravios, más gente con motivos para traicionarlos.

“Los familiares de las víctimas, sus amistades y compañeros de trabajo se sienten agredidos, resienten el maltrato y los abusos sufridos por el purgado, que a menudo se extienden a sus familias y conocidos”. 

Finalmente apuntan que “el círculo perverso de la desconfianza y el temor se acelera”, mientras los dictadores saben que a la menor señal de debilidad sus mismos allegados serán quienes los traicionen.