Renuncias, despidos y cambios tendrán efecto “boomerang” en el régimen, considera analista

Para el analista José Dávila, todas las acciones repentinas de renuncias y movimientos dentro de las instituciones son producto de la soberbia que tiene la pareja presidencial, especialmente la vicemandataria Rosario Murillo.

  • San José, Costa Rica
  • 8:55 am
  • Ago 13, 2024

El régimen sandinista ha implementado una serie de movimientos que han generado preocupación especialmente en los trabajadores estatales. Imagen: manifestantes sandinistas, en su mayoría empleados públicos, durante un acto partidario.

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Los despidos, renuncias, cambios y demás movimientos dentro de la esfera gubernamental del régimen sandinista tienen que ver con la búsqueda de lealtades “puras” y del control total de cada una de las instituciones señaló el analista político José Dávila

Agregó que todas las acciones repentinas de renuncias y movimientos dentro de las instituciones son producto de la soberbia que tiene la pareja presidencial, especialmente la vicemandataria Rosario Murillo.

Dávila apuntó que “es algo que va a ser tipo boomerang contra ellos, eso les caerá encima, tendrá consecuencias contra ellos mismos. Eso lo hacen, digamos por algún objetivo como mayor control social (…) también buscan el control, digamos, químicamente puro y solo tener gente partidaria, gente demasiado servil, demasiado leal y entonces están como escurcando para detectar a las personas que merecen seguir ahí con ellos”.

Insistió que no se debe olvidar que también está pensado en el marco de la sucesión, pues a su criterio, Rosario Murillo siente que después de Daniel Ortega viene la etapa de ella.

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“Yo tengo mis dudas, pero vamos, así lo piensa ella, entonces está preparando los cuadros que ella considera son más leales a ella que a Daniel Ortega porque ahí hay una división que ya todos conocemos entonces eso buscan”. 

Enfatizó que esas modificaciones “caerán contra ellos mismos”, pues se está llegando a un nivel donde hay mucha desconfianza, mucho espionaje inclusive dentro de ellos mismos. Cualquier comentario que privadamente haga algún funcionario, eso llega a oídos de Rosario Murillo y toma medidas.

Esto ocurrió presuntamente con Carlos Fonseca Terán, colaborador sandinista extremadamente leal al partido, hijo de uno de los fundadores, quien permanece detenido desde hace más de dos semanas junto a al menos otros 7 sandinistas por participar en un grupo de discusión de WhatsApp.

Ahí ya nadie confía en nadie, nadie está a salvo de nadie, toda es una descomposición del régimen en el que yo no veo nada ventajoso que les pueda traer a ellos y por supuesto nada a Nicaragua por el momento”, dijo Dávila. 

Agregó que Nicaragua tendrá que seguir adelante, tendrá un futuro de reconstrucción, pero este régimen, pues está en una etapa en que todo eso que está haciendo, será un boomerang para ellos.