Situación de los pueblos indígenas sigue agudizándose, denuncia defensora Anexa Alfred

Este 9 de agosto, se conmemora el Día Internacional de las Poblaciones Indígenas, mismas que en Nicaragua resisten constantes violaciones a sus derechos humanos especialmente por las instancias gubernamentales y los fanáticos del partido frente sandinista.

La abogada y defensora de los pueblos indígenas, Anexa Alfred Cunningham, señaló que la situación de estas poblaciones sigue agudizando. “Hemos visto que las violaciones persisten, la persecución, la criminalización, el destierro, la desaparición forzada es una cuestión que se está implementando en la Costa Caribe de Nicaragua”, denunció.

Cabe señalar que recientemente, Alfred fue nombrada vicepresidenta del Mecanismo de Derechos de los pueblos Indígenas de la Organización de las Naciones Unidas.

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Alfred agregó que el cierre de espacio cívico ha permitido que también se vean afectados otros derechos, como la libertad religiosa, la autonomía académica, el derecho a la propiedad de los territorios y recursos naturales. Así mismo el derecho a la libre determinación mediante el ejercicio del régimen autonómico.

“Sabemos que en las pasadas elecciones regionales, el partido político de gobierno nombró a todos los miembros de las autoridades regionales sin un proceso que permitiera la participación efectiva de los pueblos indígenas en los procesos políticos”.

La defensora añadió que a más de la mitad del 2024, la situación es cada vez más alarmante y la invasión de tierra se agudiza.

“Es una constante la falta de protección estatal a los diferentes derechos, es una realidad que ha puesto a las comunidades indígenas en situación de vulnerabilidad muchas comunidades han tenido que desplazarse también. Es una situación de crisis humanitaria en la que se vive en los territorios indígenas, pero también ha agudizado la situación en cuanto a los derechos humanos de los pueblos indígenas de la Costa Caribe de Nicaragua”.

Política de terror no debe impedir las denuncias

Alfred apuntó que es necesario seguir visualizando, denunciando y documentando lo que pasa en la Costa Caribe de Nicaragua  y que la política del terror impuesta por el régimen de Daniel Ortega, no puede paralizar, mucho menos impedir seguir evidenciando lo que pasa en el país.

“Y sobre todo usar los mecanismos de derechos humanos que existen y también buscar otras estrategias para la defensa y protección de los derechos humanos. Poder tocar las instancias financieras que también el régimen utiliza para poder financiar sus actividades criminales dentro de dentro de los territorios”, destacó la defensora.

Por  otro lado, explicó que la situación de persecución, criminalización, destierro y la desaparición forzada están aumentando. “Hay que tener presente que también la política del terror que ha implementado el régimen ha calado no solo en la población nicaragüense del pacífico sino también en la Costa Caribe Nicaragua”, lamentó. 

Insistió que una de las maneras más crueles y brutales utilizadas para implantar el terror ha sido la desaparición forzada del líder indígena Brooklyn Rivera, que hasta el día de hoy no se tiene una información oficial sobre dónde está, su situación, sus condiciones y nunca ha sido presentado ante las autoridades judiciales. Aunque sabemos que también estas están coludidas con la dictadura, entonces es muy difícil tener información, dijo Alfred.

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Así mismo señaló que han estado documentando, por ejemplo, el último destierro del sacerdote católico Rodolfo French. “En ese sentido es importante también recalcar todo lo que está pasando la comunidad cristiana moraba que es la religión fundamental principal entre los pueblos indígenas en la Costa Caribe de Nicaragua”, señaló.

Alfred señaló que su trabajo en la defensa de los territorios indígenas lo hace como indígena, lideresa miskita y sobre todo como una nicaragüense. Insistió que es bueno seguir denunciando, usando los mecanismos existentes y el conocimiento para poder activar los mecanismos que existen, a fin de poder evidenciar que la dictadura no solo está atacando al pueblo nicaragüense, en el pacífico sino que también en la Costa Caribe de Nicaragua.

“Los mecanismos existen, nosotros tratamos de poder mandar información y no solo en relación a lo que pasa con los pueblos indígenas en la Costa Caribe de Nicaragua sino también el exilio”.

Alfred detalló que entonces para sostener su labor se ha tenido que seguir reinventando para poder atender las demandas y necesidades de las comunidades indígenas dentro y fuera de Nicaragua.