Agresiones físicas de agentes de policía buscan infundir terror, considera socióloga
Al menos una vez en cada semana, se conocen por las publicaciones en redes sociales agresiones policiales que ya no se limitan a arrestos sino que antes dan golpizas, agresiones verbales y amenazas.
Las redes sociales han dejado en evidencia la realidad que en distintas zonas del país enfrentan ciudadanos nicaragüenses, que en muchas oportunidades ni siquiera se identifican como críticos del régimen de Daniel Ortega y que son agredidos físicamente por agentes policiales.
Al menos una vez en cada semana, se conocen por las publicaciones en redes sociales agresiones policiales que ya no se limitan a arrestos sino que antes dan golpizas, agresiones verbales y amenazas.
Casos en Estelí, Matagalpa, y Managua han sido viralizados en redes sociales las últimas semanas y claramente se ve a agentes de la policía golpear con las manos o con las armas de reglamento sin que las víctimas puedan decir nada y tampoco defenderse.
Además, cuando las personas que están grabando son identificadas, son amenazadas de encarcelamiento u obligadas a cesar pues los agentes de policía saben que los videos serán publicados en redes sociales.
Uno de los casos de abuso más recientes ocurrió en Camoapa, un municipio del departamento de Boaco cuando un ciudadano fue golpeado por dos agentes policiales, la tarde del domingo 21 de julio.
Los testigos indicaron que la víctima se trasladaba en su bicicleta por una de las calles de la localidad y fue interceptado por una patrulla que circulaba por el lugar y que quiso esposarlo, sin embargo la víctima les pedía que lo dejaran y por ese motivo fue golpeado.
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Una ciudadana, socióloga de profesión y hasta las protestas 2018 activista nicaragüense, a quien llamaremos Martha, dijo que en las diferentes ciudades y departamentos del país el temor se ha apoderado de la población a razón de las acciones abusivas de agentes policiales y paramilitares.
Martha señala que a lo largo de sus 20 años como activista social “nunca había visto tanta violencia junta”, pues asegura que aunque los poderes estatales siempre han intentado silenciar a quienes piensan diferente la intensidad y constancia de la actualidad es “aterradora”.
Indicó que la postura del régimen sandinista “es obligar a la ciudadanía a guardar silencio para impedir que las agresiones salgan a luz y que se mantengan activos demandando sus derechos”.
Esta ciudadana se mostró preocupada pues considera que en los próximos años el nivel de violencia puede aumentar más y entre más represión exista menos denuncias circularán.
Llamó a la ciudadanía a utilizar canales alternos de denuncia y luchar para sostener la información en los medios pues esta hace presión a las autoridades.