La abogada e investigadora, Martha Patricia Molina Montenegro, fue galardonada este jueves, junto a otras siete personas de otros países, como una de las ganadoras del premio internacional a la libertad religiosa de la Secretaría de Estado de Estados Unidos, 2023.

El reconocimiento se da a raíz de su sistematización de agresiones contra la iglesia católica y evangélica por parte del régimen sandinista.

Estados Unidos destaca en la mención que desde 2019, Martha Patricia Molina Montenegro ha documentado la represión de la dictadura a la Iglesia católica y las comunidades religiosas.

También menciona que Molina trabajó como investigadora para la organización local sin fines de lucro Hagamos Democracia, donde investigó la corrupción pública en los gobiernos central y municipal de Nicaragua.

“Sus informes completos incluyen relatos detallados de las prohibiciones gubernamentales de procesiones y otras ceremonias católicas, la expulsión del clero católico del país y el arresto arbitrario de sacerdotes, laicos y feligreses católicos”, señala la publicación.

Molina considera que represión de la dictadura empeorará

En una entrevista concedida por Molina antes del destierro de los 19 religiosos el pasado 14 de enero, consideró que la dictadura nicaragüense busca erradicar completamente a la Iglesia Católica de Nicaragua.

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“Mi hipótesis es que la dictadura busca erradicar a toda la Iglesia Católica en Nicaragua. Desde el año 2018 hasta 2023 la iglesia ha soportado más de 700 ataques y solo en 2023 se registraron más de 300 agresiones, sin incluir las procesiones y eucaristías que se prohibieron. La escalada de la dictadura ha sido terrible, fue un año sanguinario y peor que 2022”, apuntó.

Molina destacó que el 2023 estuvo marcado por las confiscaciones, congelamiento de cuentas bancarias, secuestro de sacerdotes, expulsión y exilio. “La dictadura está atacando por todos los frentes a la iglesia”.

“El silencio no ha funcionado mucho porque frente a una dictadura, hagás o no hagás siempre vas a salir perjudicado. Los sacerdotes están hablando del evangelio y esto también le incomoda a la dictadura sandinista”, remarcó Molina.