Cáncer de mamas sigue cobrando vidas en Nicaragua: ¿Cómo prevenir muertes?
El año con más defunciones por cáncer ce mamas fue 2021, con 270 casos. De estos, dos corresponden a hombres.
Entre 200 y 300 personas fallecen cada año en Nicaragua producto del Cáncer de mamas según datos oficiales del Ministerio de Salud. Hasta el cierre de 2022, al menos 235 personas fallecieron por esta causa y de este total, una incidencia se registró en un hombre.
El año con más defunciones por cáncer de mamas fue 2021, con 270 casos. De estos, dos corresponden a hombres.
Aunque no es algo común, los hombres también registran defunciones por cáncer de mamas. En los últimos cinco años, en Nicaragua, 2019 fue el período que registró mas defunciones por esta causa en hombres, alcanzando tres casos.
En 2022, el cáncer de mamas se ubicó como la quinta causa de muerte por tumores en Nicaragua.
En los últimos cinco años, se registra un leve incremento en el número de defunciones por cáncer de mamas. La doctora Xóchilt Fuentes, especialista en cirugía general, recomendó que la educación desde temprana edad es importante para prevenir muertes por esta causa.
“Es necesario que, a las adolescentes se les enseñe a hacerse el autoexamen. En Nicaragua no existe esa costumbre, hasta hace pocos años es que se comenzó a hacer hincapié en la prevención del cáncer”, dijo Fuentes a República 18.
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¿Qué hacer si existen sospechas de cáncer de mamas?
El Grupo de Trabajo sobre Servicios Preventivos de Estados Unidos conformada por médicos y expertos en enfermedades, recomiendan que las mujeres entre 50 y 74 años, y que tengan un riesgo promedio de cáncer de mama, se hagan una mamografía cada dos años.
En tanto las mujeres de entre 40 y 49 años de edad deben hablar con su médico u otro proveedor de la salud sobre cuándo deberían comenzar a hacerse mamografías y con qué frecuencia.
“Para prevenir solo se pueden tomar algunas medidas como no fumar, no tomar hormonas que no sean necesarias, no consumir drogas”, dijo Fuentes.
“Lo más importante es el autoexamen. Cada vez que uno se baña debe levantar el brazo y con la otra mano tocar el busto y ver si existe alguna masa. Se debe tener en cuenta que en el busto está la glándula mamaria. Las axilas también deben revisarse para constatar que no existan ganglios”, aseguró.
Recomendó además que se debe apretar el pezón para ver si no hay secreción.
“Hay secreción de leche y también por quistes. Si se encuentra una pelotita, aunque no duela, debe acudir urgente al centro de salud y demostrarle al médico donde está la pelotita”, afirmó.
Fuentes señaló que se debe observar el comportamiento de la piel y si el pezón no muestra cambios significativos desde que se sospecha la presencia del tumor.
“La piel se pone como de naranja cuando hay cancer, es decir, se pone dura, con los poros abiertos y el pezón se retrae”, puntualizó.
Médicos deben atender oportunamente los casos
En cuanto al procedimiento, el médico general debe mandar a hacer un ultrasonido de mamas urgente. Una vez que se encuentra el tumor, el paciente pasa a manos del cirujano, que manda una biopsia por aguja, otro ultrasonido, tomografía y otros estudios.
“Estos exámenes son más enfocados en la zona del tumor. El examen por aguja luego se manda a histopatología que es el estudio de enfermedades a través de los tejidos”, afirmó Fuentes.
Además, señaló que existen otros estudios, como citología de las secreciones, radiografía de torax y mamografías.
La especialista añadió que se debe determinar si es benigno o maligno. Si es benigno y no molesta, no es necesario extraer, solo mantener bajo observación, aunque es más recomendable extraerlo de todas maneras.
