Nicas Libres Ya! Campaña para la liberación de los presos políticos de Nicaragua
En un país donde existe más de 190 personas presas políticas la campaña busca también visibilizar a las y los encarcelados por el régimen de Daniel Ortega
Nicas Libres Ya! Es una campaña de diferentes organizaciones nicaragüenses que junto a Race and Equality busca la visibilización y liberación de los presos políticos de Nicaragua.
La campaña está dirigida a las redes sociales y cuenta con una página web con los perfiles de 41 presas y presos políticos, así como informes y documentos internacionales.
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“La página web pretende mostrar aspectos de la vida de cada persona presa política en Nicaragua”, dijo en conferencia de prensa Tania Agosti de Race and Equality.
Y también cuenta con una sección llamada “mensaje de solidaridad”, donde cualquier persona puede escribir mensajes que luego serán enviados a los presos políticos.
“Esta es la reafirmación colectiva ante el mundo del compromiso que tenemos de continuar luchando por todas las personas presas políticas de Nicaragua”, dijo por su parte Vilma Núñez, del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (CENIDH).
Campaña demanda la liberación de todos los presos políticos
La campaña además de informar sobre la situación en la que viven las y los presos políticos pretende buscar su pronta liberación, a través de la visibilización.
Puesto que para defensoras de derechos humanos nicaragüenses “las condiciones de reclusión no cumplen las reglas Mandela, ni los estándares internacionales para personas detenidas”.
“No hay Estado de derecho ni separación de poderes y se vive un Estado de excepción de hecho”, refirió Vilma Núñez, del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (CENIDH).
Derechos de presos políticos violentados en Centros Penitenciarios
De igual manera, Caren Lacayo, hermana del preso político Edward Lacayo denunció que en el Centro Penitenciario le “están robando gran parte de la provisión que le llevan a su hermano”.
Confirmando así múltiples denuncias de familiares de personas presas políticas quienes por temor a tener mayor represalias no realizan ninguna queja.
“¿Por qué a los presos comunes les dan un mejor trato sabiendo que de verdad cometieron crímenes?”, refirió Lacayo, “mi hermano tiene 3 años y 4 meses en esa celda, sabiendo que es inocente al delito que le imputaron”.
Campaña también visibilizará violencia contra presas políticas
Del total de 190 personas presas políticas de Nicaragua 18 son mujeres, según el Mecanismo para el Reconocimiento de las Personas Presas Políticas.
Sin embargo, para la familiar de presas políticas, Ana Álvarez Vijil, existe una particular saña en contra de las mujeres presas políticas.
Ella explica que el nivel de agresiones en los arrestos ha sido mayor e incluye sustracción de artículos personales como álbumes de fotos familiares y el arresto en presencia de sus hijos e hijas ha “ha sido un factor fundamental para los captores”, señala Álvarez.
De igual manera la violencia psicológica se refleja en interrogatorios periódicos y “el requerimiento de información no pertinente como su orientación sexual, sus parejas y si llegaban hombres a las viviendas, etc”.
Hay una saña particular contra las mujeres
Según Álvarez Vijil desde la Iniciativa Mesoamericana de Mujeres (IM-Defensoras) han contabilizado 44 agresiones sexuales contra presas políticas en Nicaragua desde 2018.
Estos casos van desde violaciones sexuales, hasta inspecciones extremas a sus cuerpos, tocamientos en sus partes genitales y en los senos.
“En el caso de las mujeres madres, existe el testimonios del uso de hijos e hijas para amedrentarlas en su labor de defensoras de derechos humanos y las llaman malas madres”.
Además del abuso al que son sometidas las presas políticas, son torturadas pues no cuentan con una alimentación adecuada y presentan una extrema reducción de peso.
“Tienen afecciones en la piel y despigmentación, dolor de espalda, problemas cardíacos severos, dificultades para caminar, asma y presión arterial alta”, agrega.
Esto se debe principalmente porque han sido privadas de tener acceso a luz solar y de tener un espacio al aire libre, también son sometidas a aislamiento e incomunicación prolongada.
Campaña evidenciará tortura empleada por el régimen
“La práctica sistemática de la tortura sigue vigente en el país, como un modelo de represión instaurado desde inicio de las protestas en 2018”, mencionó Carlos Guadamúz, abogado defensor de derechos humanos.
El integrante del Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca + respalda su afirmación en los testimonios de los más de 200 jóvenes que fueron liberados en 2018 en una carretera de Tipitapa.
Los jóvenes relataron que fueron secuestrados, rapados y los custodios del Sistema Penitenciario Jorge Navarro hicieron fila para patearlos.
El defensor de derechos humanos explica que desde el año 2018, el régimen de Daniel Ortega ha implementado técnicas de tortura sistemática.
Métodos de tortura a la orden del día y en cualquier parte del país
Desde las detenciones arbitrarias, a golpizas, la falta de información a familiares, violencia sicológica e ineficacia de cualquier mecanismo interno para la defensa.
De igual manera, ante la alta taza de arrestos a manifestantes o disidentes fueron fueron utilizados centros de detención clandestinas como fincas, centros políticos del FSLN y Alcaldías.
En estos centros de detención fueron sometidos a aislamientos prolongados, asfixias secas y húmedas, tortura por suspensión, que consta en colgar a una persona por sus extremidades superiores e inferiores.
De igual manera fue aplicada la tortura sensorial a con lo que se ha utilizado una luz potente, extracción violenta de uñas y violencia psicológica.
Este último método de violencia consta principalmente de amenazas contra sus familiares, como decirles que también los encerrarán, los asesinarán o incluso que los violarán.
Guadamúz explica que desde 2018 el Estado se ha caracterizado por una “política de puerta giratoria, es decir, a la vez que aplica Leyes de Amnistía para liberar a presos políticos, encarcela a otros”.