Fátima Guevara: la resistencia desde el canto
Esta joven autoconvocada quien ha pasado peripecias en el exilio abraza la esperanza de retornar a una Nicaragua en libertad, mientras eso ocurre se fortalece acuerpada de su familia y el canto
Hablar de Fátima Guevara, es sinónimo de mujer incansable y luchadora por su familia y su país. Ella es oriunda de Chinandega, departamento en el occidente de Nicaragua, donde se dedicaba a cantar música tropical y además era conductora de un programa radial, pero desde el estallido social en abril de 2018, su vida como la de cientos de miles de nicaragüenses cambió drásticamente. Pasó de la comodidad de su casa, a estar en casas de seguridad hasta empezar una nueva vida en el exilio.
“Fue en una calle de Chinandega mientras hacía una transmisión en vivo durante una marcha de autoconvocados, cuando de pronto los miembros de la Juventud Sandinista y la Policía Orteguista nos cayeron a palos, y ahí supe cómo actuaba la represión de Daniel Ortega. Yo siempre he sido una mujer que no ha militado en ningún partido, soy apolítica, pero no podía callar ante tantas injusticias y los primeros asesinados, de modo que haberme sumado al movimiento de autoconvocados, me valió perder mi trabajo, el rechazo de los que supuestamente eran mis amistades y dejar a mi familia me dolió tanto, sin embargo, yo sigo con mi lucha para tener una Nicaragua democrática”, sostiene esta joven nicaragüense.
Asegura que su lucha la trasladó hacia la capital de Nicaragua, donde estuvo atrincherada junto a los jóvenes en la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN), luego se trasladó a León, donde estuvo escondida en una casa y en esa ciudad sufrió un intento de violación por parte de un sujeto que ella presume que era miembro de la Juventud Sandinista de esa zona, asegura que ese hecho la marcó porque fue un episodio traumático en su agitada vida, sin embargo con mucha valentía supo defenderse para salir ilesa del intento de agresión sexual.
Autora de la canción azul y blanco
Fátima Guevara es la autora de una canción de lucha azul y blanco llamada “Nicaragua libre por gracia de Dios”, que fue entonada por ella misma durante los diferentes momentos de lucha, esta composición musical fue creada en una trinchera de la UNAN después de conocer a su amigo de lucha Harvin Lesage (exreo político) , “Él me inspiró la letra de la canción, cuando un productor de Chinandega me mandó la pista musical, entonces yo comencé a escribir la letra en donde expreso todo lo que sentía, los borradores de la canción fueron mejorando hasta tenerla completa. Cuando grabé esa canción sentí que me liberé de todo lo que venia cargando en mi periplo por la lucha, fue un gran desahogo, y esa es la canción con la que me identifico como atrincherada y autoconvocada”, comparte Guevara.
Tras innumerables amenazas de muerte por parte de las hordas orteguistas, Fátima Guevara se vio obligada a vivir en diferentes casas de seguridad en Nicaragua, sin embargo la propaganda negativa en su contra y de otros artistas, la mantenían al borde del colapso, por lo que valoró todos los asedios y amenazas contra su integridad física, y no le quedó otra opción que exiliarse en enero de 2019 en el vecino país de Costa Rica, donde encontró el amor y una de las bendiciones más grande: su hijo Mateo, fruto del amor junto a un joven de Matagalpa quien también es exiliado. Su hijo nació en suelo tico y fue nacionalizado costarricense. Estando en un país ajeno, relata que no todo ha sido fácil, pues ha pasado por muchos momentos para el olvido.
“Durante mi exilio una de las primeras cosas más difíciles que he experimentado es el proceso sicológico, el dolor, la nostalgia de no estar en tu país. Durante los primeros meses, estoy segura que todos hemos pasado por la depresión y la desesperación, y esas han sido las cosas que más me han afectado, sin embargo, al nacer mi hijo Mateo, Costa Rica me dio esta nueva esperanza”.
La ilusión de convertirse en madre se empañó con una complicación durante su embarazo, que no pudo atender debidamente ya que el sistema de salud de Costa Rica le negó atención prenatal. “En esto quiero hacer énfasis que a muchas mujeres nicaragüenses se les niega la atención prenatal en los Ebais, que son los centros de salud de cada zona, por razones de xenofobia. A los nueve meses me contagié de Covid 19 estando embarazada sin embargo la atención me fue negada aquí”, sostiene.
El canto y su familia como motores para seguir adelante
Después de estar mucho tiempo sin poder conseguir empleo, Fátima Guevara pudo trabajar temporalmente en una firma encuestadora y actualmente esta artista nicaragüense se dedica a cantar dos días a la semana en un bar restaurante de San José, cuyo propietario es un nicaragüense, y el resto de los días trabaja como mesera en ese mismo lugar. Asegura que la ventaja de estar en el vecino país es que tiene la seguridad de caminar libremente por las calles y movilizarse por todo el territorio sin el temor de sufrir alguna agresión por parte del gobierno tico.
Junto a su pareja, un joven exiliado a quien conoció en un taller de liderazgo planea salir adelante y trabajar incansablemente para tener una estabilidad que les permita proveer todas las oportunidades para su hijo, que hoy es el motor de sus vidas.
“Queremos darle una buena educación a nuestro hijo y también darle una estabilidad, lo que anima mucho es que Mateo nace en un país donde no hay ejército, por lo que él no va a estar obligado a enfilarse en ninguna tropa, además se va a desarrollar en un país donde hay democracia”.
Además, Fátima Guevara no concibe la vida en el exilio sin poder ayudar a otros compatriotas que han pasado dificultades como ella. Por otro lado, sostiene la esperanza que Nicaragua un día alcanzará la libertad tan ansiada.
“Yo creo que mi Nicaragua todavía va a seguir secuestrada por Daniel Ortega y Rosario Murillo, sin embargo a pesar que sigue en tinieblas, tengo la esperanza que más temprano que tarde mi país va a renacer y saldrá un sol de libertad y cuando eso suceda, nosotros vamos a estar dispuesto a retornar. Yo estoy segura que el tiempo de Dios es perfecto por eso tengo la esperanza de que el pueblo seguirá resistiendo y desde alguna trinchera vamos a seguir alzando la voz hasta tener justicia por los asesinados y presos políticos”, asegura la chinandegana.