Periodista exiliado en Costa Rica se vacuna contra el covid-19

Para él “ha sido un privilegio” acceder a la vacuna en el extranjero, porque reconoce que hay muchos exiliados que no gozan de la atención necesaria en servicios de salud

  • 9:58 pm
  • May 4, 2021
República 18

El primer periodista exiliado en Costa Rica que se vacuna contra el Covid-19 en el transcurso de lo que va del año, es originario de la ciudad colonial de Granada.

Armando Espinoza, de 59 años de edad, forma parte de los más de 40 periodistas que continúan en Costa Rica por la falta de condiciones que garanticen su retorno seguro a Nicaragua.

Para él “ha sido un privilegio” acceder a la vacuna en el extranjero, porque reconoce que hay muchos exiliados que no gozan de la atención necesaria en servicios de salud.

“Me atendieron bien”

Espinoza relató a República 18 que mientras estuvo en el “EBAIS” (Centro de Salud) esperando que lo vacunaran, gozó de “buena atención” por parte del personal de salud.

Anteriormente, las autoridades de la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS) lo contactaron vía telefónica para notificarle que el día 20 de abril debía presentarse su cita de vacunación, pues Espinoza contaba con el seguro de salud que la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) brindó a 10 mil exiliados nicaragüenses.

“Fijate que me atendieron bien, porque me hicieron pasar (al Centro de Salud), me dieron un carnet de identificación, me senté en una primera estación. Luego me llamaron para constatar mis datos personales y posterior me dieron la tarjeta (de vacunación) para esperar la hora de la vacuna”, relata.

Al momento de ponerle la vacuna de Pfizer, se fijó si la dosis le estaba siendo administrada y luego, el personal de salud procedió a ubicarlo en una sala de espera en caso que presentara síntomas alérgicos.

Síntomas secundarios leves

Durante días posteriores ala primera dosis, Espinoza presentó algunos síntomas secundarios comunes como dolor en el brazo donde aplicaron la vacuna, mareos y dolor de cabeza durante tres días.

Aunque sabía que podía presentar síntomas secundarios severos, Espinoza asegura que vacunarse fue lo mejor porque tenía “temor” de contagiarse nuevamente de Covid-19, como le ocurrió meses atrás.

Tarjeta de vacunación que el Ministerio de Salud brinda en Costa Rica.

“Ahora ya estoy bien”, señala, pero recuerda que tuvo que ser hospitalizado por 15 días y pasar otros 13 días en cama por la magnitud de la infección.

Durante este terrible episodio de su vida, el apoyo de su esposa, quién también estuvo contagiada, fue fundamental para su recuperación.

La salud está politizada en Nicaragua

Una de las cosas que Espinoza reconoce es que seguramente en Nicaragua no habría tenido la misma atención médica recibida en Costa Rica.

Esto debido a la politización de las Instituciones del Estado y el control que el régimen ejerce sobre ellas. Inclusive, señala que si Ileana Lacayo se hubiera enfermado y atendido en Costa Rica, probablemente estaría aún con vida.

“Si vos sos opositor no vas a recibir la misma atención que puede recibir su gente”, señala.

Llama a cuidarse del Covid-19

Ante el repunte de casos de Covid-19 en Costa Rica, Espinoza hace un llamado a los nicaragüenses exiliados en ese país a acatar las normas sanitarias sugeridas por el Ministerio de Salud y la CCSS.

“Hay personas que andan sin mascarilla y este es un problema real”, señala, “hay mucha confianza, la mayoría de la gente no está acostumbrada a acatar las normas. Yo motivo a la gente a que tiene que cuidarse, porque incluso, estando vacunado nadie es inmune”.

Ahora Espinoza debe esperar hasta el 11 de este mes para colocarse la segunda dosis de la vacuna de Pfizer, en un país donde la jornada de vacunación ha alcanzado a 950,252 personas.

Donde 605,099 se han aplicado la primera dosis y 345,153 la segunda. A diferencia de Nicaragua, Costa Rica, al igual que los demás países centroamericanos lleva un recuento de casos y personas vacunadas, estos datos son accesibles para la población.