Migrante nicaragüense desaparecida en frontera es la víctima número 21 de la violencia femicida

Norma Rosa Saravia, desapareció desde el 30 de marzo, cuando cruzada de manera irregular el puesto fronterizo de Las Tablillas, ruta hacia los Chiles, Costa Rica.

  • 9:14 pm
  • Abr 13, 2021
migrante nicaragüense encontrada muerta
República 18

Tras 14 días de haber sido reportada como desaparecida, la búsqueda de la migrante nicaragüense Norma Rosa Saravia Rugama de 59 años, finalizó trágicamente esta mañana al encontrar su cuerpo sin vida.

La nicaragüense, originaria de la ciudad de Boaco, desapareció desde el 30 de marzo, cuando cruzada de manera irregular el puesto fronterizo de Las Tablillas, ruta hacia los Chiles, Costa Rica.

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Norma Elena Sandoval, hija de Saravia en declaraciones al periodista Lésber Quintero explicó que a su mamá la empezaron a buscar desde el primero de abril, cuando confirmaron que no había llegado a su destino; San Ramón de Alajuela, donde la habían contratado para trabajar en una casa.

“Primero empezamos a llamarla a su celular, pero salía apagado y pensábamos que se lo habían robado, luego nos comunicamos con amigos y familiares que viven en Costa Rica, para averiguar si estaba en casa de ellos, pero todo era negativo y decidimos irnos desde el 5 de abril, al lado nicaragüense del puesto fronterizo para buscarla”, fue parte del relato de la hija de Saravia.

De acuerdo a la hija de Saravia, la nicaragüense emprendió el viaje por trabajo y le pagó a un “coyote” para que le ayudará a pasar la frontera, hasta ponerla a salvo en el sector de Los Chiles en territorio costarricense.

Autoridades actuaron con lentitud e indolencia

La activista feminista María Teresa Blandón, señala que la migrante nicaragüense se convierte en la víctima número 21 de la violencia de género en Nicaragua. Lamentó que pese a que la familia puso en conocimiento a las autoridades publicas se actuó con lentitud e indiferencia.

Blandón expresó a República 18 que, por un lado, hay un esfuerzo muy grande del Ejército de Nicaragua y de la Policía Nacional para impedir el paso ilegal de personas, también para perseguir a los opositores del régimen Ortega-Murillo que se han trasladado a Costa Rica, “pero en este caso cuando se trata de la vida de una mujer que va a buscar trabajo la actitud de los funcionarios públicos y de las instituciones castrenses es más bien de indolencia”.

La vida de las mujeres no es prioridad para el Estado de Nicaragua, asegura Blandón, por eso es que han ido incrementando año con año el número de femicidios, “también por eso los asesinos, los femicidas sienten que pueden disponer de la vida de las mujeres sin tener que pagar por ello, es decir una sanción correspondiente a la gravedad de ese delito”

En tanto, Maricé Mejía, coordinadora nacional de la Red de Mujeres Contra la Violencia (RMCV), dijo que la violencia femicida se está apoderando de los países de la región, especialmente en Nicaragua donde el Estado está siendo incapaz de resolver un problema que necesita de respuestas integrales y que cada día es más grave.

“Este femicidio es una muestra de que la violencia femicida no distingue nacionalidad, edad, no distingue absolutamente nada. Estamos ante un panorama inseguro para la vida de las mujeres y las niñas; estamos ante un panorama de alerta roja por tantos crímenes”, finalizó Mejía.

De acuerdo al más reciente informe de Católicas por el Derecho a Decidir, en el primer trimestre de 2021, se documentaron al menos 19 femicidios y 41 femicidios frustrados, cifras que superan los 17 femicidos y 30 femicidos frustrados que la organización reportó en el mismo periodo de 2020.