Fundación Violeta registra 30 violaciones a la libertad de prensa en un mes
Ante los hechos de violencia y acoso, la periodista y defensora Wendy Quintero recomienda la solidaridad y la unidad porque el régimen está desesperado por callar a los periodistas
Agresiones, acoso, hostigamiento, amenazas de muerte son algunas de las situaciones a las que se han enfrentado los y las periodistas en Nicaragua desde que el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo declararon su desprecio contra los medios independientes.
La Fundación Violeta Barrios de Chamorro en su reciente Informe de Violaciones a la Libertad de Prensa en julio de 2020, documentaron 30 casos de violaciones a la libertad de prensa, de los cuales 18 fueron contra los periodistas y medios de comunicación, lo que da como resultado un total de 14 víctimas, ocho hombres y seis mujeres.
Uno de los casos más fuertes fue contra el periodista Gerald Chávez Nicaragua, exiliado en Costa Rica, a quien grupos afines a la pareja presidencial crearon un vídeo simulando como lo iban a matar y hostigaron a su familia.
“El total de 18 casos documentados en contra de periodistas independientes equivale al 60% de los casos sistematizados; en cambio los 12 casos lesivos contra medios de comunicación representan el 40% de total de violaciones registrada en el mes de julio 2020”, detalla el informe.
Ataques a medios locales
Otro de los medios de comunicación que ha sufrido ataques y daños a su infraestructura por partidarios del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) es Radio Camoapa Estéreo, ubicada a 115 kilómetro de la capital.
Con la represión de abril de 2018 varios de sus colaboradores tuvieron que emigrar y otra parte quedó en el desempleo consecuencia de los altos costos en los servicios y la crisis económica.
Juan Carlos Duarte, director de la emisora en diversas ocasiones denunció los hechos y los peligros que corría su personal y su familia por el acoso, el hostigamiento y las agresiones verbales de los oficiales de la localidad.
Otra de las emisoras atacadas por el Estado es Radio La Costeñisíma, ubicada en Bluefields, donde su jefa de prensa, Kalúa Salazar, han sido enjuiciada por denuncias de miembros del FSLN.
Para la periodista y defensora de derechos humanos del Colectivo Nicaragua Nunca Más, Wendy Quintero manifestó que las “violaciones a los derechos humanos van en crecimiento porque es lo que le queda al régimen por absorber y como no lo ha logrado las irá arreciando, caso del canal 12”.
Quintero detalla que Ortega y Murillo seguirán utilizando las leyes para coartar los derechos de las personas, entre ellos la libertad de prensa y expresión.
“Estos derechos que te señalo tienen que ver con algo que le huye el régimen y que está íntimamente ligado a la libertad de opinión y religión en cuanto a que las personas tenemos libertad de pensamiento y de creer o no en lo que queramos, son derechos inalienables que nacen con nosotros y cuando se juntan y ves a medios independientes que se toman en serio su papel ante una sociedad democrática tenés en cada medio y periodista que fiscaliza el poder”.
La defensora y periodista resalta que mientras no haya una separación de los poderes del Estado en Nicaragua solo queda seguir luchando para que en un momento se respeten las leyes y la Constitución Política.
Los periodistas deben de estar unidos
Ante los hechos de violencia y acoso, Quintero recomienda la solidaridad y la unidad porque el régimen está desesperado por callar a los periodistas y atacará hasta que logre lo que busca.
“Va incrementando las agresiones, robos y discurso de odio hacia periodistas y medios independientes hasta el punto de llegar a atentar contra la vida, integridad física y sicológica de estos profesionales de la comunicación”, dijo.
Finalmente, pide al gremio de periodistas en el país estar unidos, ser creativos y utilizar los pocos recursos que quedan para darle voz a los que “el régimen quiere silenciar”.
